Último momento: Aliados de los animales bloquean el papamóvil y suplican al papa Francisco que condene las crueles corridas de toros.

Último momento: Aliados de los animales bloquean el papamóvil y suplican al papa Francisco que condene las crueles corridas de toros.

Luxemburgo – El día de hoy, la procesión del papa Francisco por la ciudad de Luxemburgo fue interrumpida por un grupo de simpatizantes de PETA quienes rodearon el papamóvil para suplicar a Su Santidad que rompa los vínculos de la Iglesia Católica con la tauromaquia y condene estos despreciables eventos sangrientos. Vestidas con camisetas que decían “¡Dejen de bendecir las corridas!” y portando carteles que proclamaban “¡Las corridas de toros son pecado!”, las defensoras de los animales se arrodillaron frente al vehículo del pontífice hasta que la policía violentamente las esposó y arrestó, arrojandolas incluso contra un muro.

Fotos y un video de la acción están disponibles aquí.

“La bendición de los sacerdotes a los matadores que infligen agonía a toros aterrorizados antes de matarlos violentamente son una burla grotesca a las enseñanzas de misericordia y compasión de Cristo”, dice Mimi Bekhechi, vicepresidenta de PETA. “PETA le pide al papa Francisco que condene la tauromaquia como un agravio a Dios y que ponga fin a la vergonzosa afiliación de la Iglesia con estos espectáculos profanos.

Cada año, decenas de miles de toros son atormentados y asesinados en festivales taurinos en todo el mundo, muchos de los cuales se celebran en honor a santos católicos. Durante estos eventos, agresores a caballo clavan lanzas en el lomo del toro antes de que otros le claven banderillas en la parte superior de la espalda, infligiendo un dolor agudo cada vez que gira la cabeza y afectando su rango de movimiento. Finalmente, cuando el toro está debilitado por la pérdida de sangre, aparece un matador e intenta matarlo clavándole una espada en los pulmones o, si eso falla, cortándole la médula espinal con una daga. El toro puede quedar paralizado, pero aún consciente mientras el matador le corta las orejas o la cola como trofeo y su cuerpo es arrastrado fuera del ruedo.

El papa Francisco escribió en su encíclica Laudato Si’: “Todo acto de crueldad hacia cualquier criatura es ‘contrario a la dignidad humana’”; y ya en el siglo XVI, el papa Pío V, quien desde entonces fue canonizado, prohibió las corridas de toros, que describió como “espectáculos crueles y viles del demonio y no del hombre” y contrarios a la “piedad y caridad cristianas”. El párrafo #2418 del Catecismo de la Iglesia Católica declara claramente que los humanos no deberían “hacer sufrir inútilmente a los animales”; sin embargo, los sacerdotes católicos a menudo ofician ceremonias religiosas en plazas de toros y ministran a los toreros en las capillas de estas plazas. Algunos hasta atacan a los toros en el ruedo vestidos con sotana.

PETA Latino, cuyo lema dice, en parte, que “los animales no son nuestros para usarlos para el entretenimiento”, se opone al especismo, una visión supremacista del mundo. Para obtener más información, visite PETALatino.com o siga a la agrupación en XFacebook Instagram.

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