Dos universidades mexicanas se han negado hasta ahora a prohibir un experimento cruel y ampliamente desacreditado en el que pequeños animales son forzados a nadar para salvar su vida. Necesitamos tu ayuda para presionarlas a prohibir la prueba de nado forzado y así convertirse en ejemplo para México y el resto de América Latina.
En conversaciones recientes con científicos de PETA, funcionarios del Instituto Politécnico Nacional (IPN, en Ciudad de México) y de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP, en Puebla) aseguraron vagamente que las universidades considerarían nuestra solicitud de prohibir esta prueba cruel e inútil. Eso fue hace meses. La comunicación ha cesado.
Con tu ayuda, esperamos captar de nuevo su interés.
La Crueldad de la Prueba de Nado Forzado
Realizada desde la década de 1950, la prueba de nado forzado es tan cruel como inútil. Los experimentadores ponen ratones, ratas, cobayas, hámsteres o jerbos en un recipiente lleno de agua del cual no pueden escapar. Los animales entran en pánico y tratan de trepar por las paredes del recipiente o se sumergen bajo el agua en busca de una salida. Patalean y tratan desesperadamente de mantener la cabeza fuera del agua. Eventualmente, comienzan a flotar.
Este absurdo experimento supuestamente nos dice algo sobre la efectividad en humanos de los antidepresivos experimentales con base en el tiempo que los animales nadan antes de empezar a flotar.
Pero la prueba ha sido fuertemente criticada por otros científicos que argumentan que flotar no es un signo de desesperanza sino de aprendizaje, ahorro de energía y adaptación a un nuevo ambiente.
La Prueba de Nado Forzado No Es Ciencia
Obligar a estos pequeños y vulnerables animales a nadar para salvar su vida es un mediocre modelo de la salud mental humana. Este experimento no hace más que aterrorizarlos.
Esta prueba es tan inútil que predice menos que lanzar una moneda al aire. Esto es lo que encontró la Dra. Emily Trunnell luego de analizar el uso de esta prueba por parte de las principales compañías farmacéuticas. Su estudio fue publicado en Drug Discovery Today.
Cómo Puedes Ayudar
Luego de entablar conversaciones con PETA y sus entidades internacionales, varias universidades y 15 importantes compañías farmacéuticas, incluidas Bayer y Johnson & Johnson, afirmaron que dejarían de usar la prueba de nado forzado.
Por favor, ¡toma unos minutos para ACTUAR! Haz clic para enviar una carta respetuosa al Instituto Politécnico Nacional y a la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla pidiéndoles que prohíban ya y permanentemente la prueba de nado forzado.