Imagina ser sacado de un tanque, arrojado sobre una mesa e inmovilizado mientras tus brazos y piernas son cortados. En restaurantes de todo el país, pulpos – después de sufrir ser enviados a través de la mitad del mundo – son partidos y servidos en un platillo coreano llamado “sannakji” (literalmente, “pulpo retorciéndose”).
En septiembre de 2016, PETA se introdujo en los restaurantes de Los Ángeles que mutilan y sirven animales vivos. En T Equals Fish, los observadores de PETA vieron con horror cómo los chefs sujetaban un pulpo – llamado “Pearl” por un observador – y cortaron sus sensibles extremidades con un cuchillo de carnicero. Las extremidades seccionadas, que continuaban moviéndose y reaccionando a los estímulos, fueron servidas, retorciéndose, a los clientes.
Pero el sufrimiento del inteligente y sensible pulpo estaba lejos de haber terminado. El personal de la cocina, explicó que lo mantendrían vivo hasta que otro cliente ordenara el resto de los miembros. Retorciéndose impotente y tratando desesperadamente de escapar, Pearl fue hecha a un lado como un trozo de zanahoria o tomate. Según el chef, después de que el último brazo y pierna haya sido cortado, la matarían desgarrando su cuerpo y extrayendo sus intestinos.
“[E]l pulpo, que has cortado en pedazos, siente dolor cada vez que lo haces. Es tan doloroso como si se tratara de un cerdo, un pez o un conejo, como si cortaras una pierna de un conejo en pedazos. Así que es algo bárbaro lo que se le hace al animal”.
-Experta en cefalópodos Dra. Jennifer Mather
Camarones y langostas desgarradas, animales cocidos al vapor vivos
T Equals Fish es solo uno de los más de una docena de restaurantes en California y Nueva York que mutilan y sirven vivos pulpos y otros animales.
Los restaurantes “prepararan” camarones vivos cortando sus colas y poniéndolas en platos junto a sus cuerpos en movimiento o arrancando sus exoesqueletos, para que los clientes puedan morder directamente su carne. Las colas de las langostas también son arrancadas y preparadas “al estilo sashimi”, y servidas junto a sus cuerpos mutilados pero todavía vivos, para la diversión de los clientes. Algunos restaurantes cocinan al vapor langostas, pulpos y otros animales vivos en ollas calientes de “mariscos vivos”. La estridente clientela entre risas suelen pinchar a los animales que siguen luchando, y algunos de ellos son “encargados” de impedir que escapen.
La ciencia es clara
Los pulpos son juguetones, ingeniosos y tan inteligentes que a veces son llamados los “primates del mar.” Los lectores recordarán a Inky, un pulpo en el Acuario Nacional de Nueva Zelandia, quien estuvo en los titulares internacionales en abril del 2016 después de saltar de un tanque, atravesó el piso del acuario y se deslizó por un tubo de 164 pies hacia la libertad. Otto, un pulpo en un acuario alemán que ya era conocido por hacer malabares con cangrejos ermitaños y reorganizar su tanque, repetidamente provocaba un cortocircuito en una molesta luz brillante al saltar en el borde del tanque y salpicarla con agua. Al igual que los chimpancés, los cuervos, los humanos y los delfines, los pulpos también utilizan herramientas. Los pulpos veteados llevan las cáscaras de coco a través del suelo del océano antes de colocar meticulosamente las dos mitades juntas y meterse para ocultarse. Los pulpos manta arrancan los tentáculos venenosos de la fragata portuguesa y los esgrimen como espadas. Y los pulpos mimo imitan a más de 15 especies diferentes.
Cuando se trata de experimentar dolor, el Dr. Mather explica que los pulpos “pueden prever una situación dolorosa, difícil y estresante – pueden recordarla. No hay absolutamente ninguna duda de que sienten dolor”. Los camarones, las langostas y otros crustáceos cumplen con todos los “criterios” de sensación de dolor, incluyendo un sistema nervioso desarrollado, y exhiben comportamientos para evitar lastimarse y de alta protección, tal como un perro, un cerdo o un primate lo harían. Y según el zoólogo especialista en invertebrados, el Dr. Jaren G. Horsley, “[Una] langosta sufre un enorme dolor al ser cortada y abierta… [y] siente todo el dolor hasta que su sistema nervioso es destruido”.