Los videos grabados por los propios visitantes del SeaWorld revelan los agobiantes efectos físicos y psicológicos del cautiverio:
1. Este delfín sangrado e indefenso chocó con otro delfín y fue arrojado de su pequeño tanque en el SeaWorld de San Antonio.
2. Esta ballena piloto luchó durante 25 minutos en aguas poco profundas mientras que un visitante gritaba horrorizado, “¡El delfíin – está atascado!”.
3. Esta orca, irremediablemente confinada a únicamente .0001% del espacio al que el animal hubiera tenido en la naturaleza, golpeó repetidamente su cabeza contra el concreto.
4. Esta orca flota inerte debido al cruel confinamiento. En la naturaleza, este animal nadaría más de 100 millas en un día y estaría en movimiento casi constantemente.
5. A esta orca se le vio vomitar.
6. Cuando a un depredador ápice de 12.000 libras se le pone en un pequeño tanque con seres humanos, no solo no es saludable para el animal, también es peligroso para los humanos.
National Anti-Vivisection Society
Aquí, el entrenador Ken Peters está en las mandíbulas de Kasatka, una orca capturada frente a las costas de Islandia en 1978.
7. A este delfín se le vio morder a una niña en el SeaWorld.
Estas condiciones crueles fueron grabadas en video por los visitantes en el SeaWorld. Si este tipo de maltrato está sucediendo enfrente del público, imagina lo que pasa a puertas cerradas. Dile al mundo que los animales no están predestinados para ser confinados en el SeaWorld:
DILE A SEAWORLD QUE ENVÍE A LAS ORCAS A SANTUARIOS COSTEROS
