¡Victoria para los animales! Después de que PETA escribiera una persuasiva carta a Kikkoman, el fabricante de salsa de soya más grande del mundo, la compañía actualizó su política de pruebas en animales. La nueva política de Kikkoman establece que no realizará, financiará ni encargará pruebas en animales para alimentos y bebidas, excepto cuando sean requeridas por la ley.
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La compañía también está restringiendo el apoyo financiero al Instituto de Investigación Alimentaria (FRI) de la Universidad de Wisconsin-Madison para no respaldar más las pruebas en animales allí, después de que PETA le recordara al presidente y CEO de la compañía que los experimentadores de la universidad obligaron varias veces a los animales a comer bacterias antes de diseccionar sus cuerpos, entre otros horrores. Kikkoman ahora ha tomado la decisión compasiva de solicitar que los fondos que antes destinaba al FRI ahora sean destinados a programas educativos, reuniones especiales y gastos administrativos, en lugar de a pruebas crueles y sin sentido en animales.
Experimentadores del FRI atormentan a ratones y monos por ‘curiosidad’
Los experimentadores del instituto han conducido numerosos experimentos barbáricos en animales, a pesar de su inaplicabilidad a la salud humana y de la disponibilidad de métodos de investigación superiores sin animales. En una prueba, los experimentadores alimentaron a monas embarazadas por la fuerza con crema batida contaminada con Listeria, matando a algunos de sus fetos. Luego abrieron a las madres, tomaron a sus bebés muertos y diseccionaron los cadáveres. En otra prueba, los experimentadores alimentaron a unos ratones con bacterias varias veces, los asfixiaron y los diseccionaron. Los experimentadores también inyectaron bacterias productoras de toxina botulínica en ratones y esperaron a que murieran a causa de la toxina.
Anteriormente, PETA presionó a Kikkoman para que pusiera fin a sus propias pruebas en animales, y la política actualizada de la compañía y la restricción del financiamiento a la UW-Madison dejan aún más claro que la compañía se ha cambiado a métodos de prueba humanitarios de manera global.
En 2015, después de una fuerte campaña de PETA que duró un mes e incluyó más de 100.000 correos y numerosas publicaciones críticas en las redes sociales, historias mordaces en los medios y un bombardeo de llamadas telefónicas a las oficinas de la compañía en EE.UU., Kikkoman puso fin a su vieja práctica de alimentar por la fuerza a ratones, conejos y otros animales con salsa de soya y otros alimentos en intentos de declarar propiedades saludables en sus productos para comercializarlos. La compañía también se comprometió a introducir y desarrollar métodos de prueba sin animales.
Ahora, tras conversaciones con PETA, Kikkoman dará un paso más por los animales dirigiendo sus fondos hacia la investigación sin animales en el FRI que la compañía patrocina. De igual forma en 2020, luego de escuchar a PETA, Dole Food Company realizó una acción progresista parecida, cuando redirigió los fondos de un experimentador de la Clínica Mayo a un investigador en el área de nutrición que usa exclusivamente métodos sin animales y relevantes para los humanos.
¡Ayuda a PETA a usar esta victoria para impulsar a más compañías a seguir su ejemplo!
Si bien muchas compañías de alimentos se están cambiando a métodos modernos de investigación sin animales, otras, como Ajinomoto Co. Inc., todavía atormentan y matan animales en pruebas abusivas para hacer afirmaciones dudosas sobre las propiedades saludables de sus productos con el fin de comercializarlos. Ayuda a PETA a presionar a Ajinomoto para que prohíba las pruebas en animales:
Insta al gigante del glutamato monosódico (GMS) a poner fin a las horribles pruebas en perros y otros animalesNo te detengas en las compañías de alimentos: ayuda a PETA a reemplazar las arcaicas pruebas en animales por investigaciones modernas en todos los laboratorios, apoyando nuestro Acuerdo de Modernización de la Investigación:
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