La gente visita Petra, Jordania para admirar los monumentos y templos antiguos, pero la “ciudad perdida” tiene un lado oscuro. Ten cuidado, te decimos qué puedes hacer:
1.Los cuidadores a menudo azotan y golpean a los animales malnutridos, heridos y exhaustos.
Más de 1,300 caballos, asnos, mulas y camellos son forzados a cargar turistas o halar carruajes por la ciudad todo el día, todos los días. A plena vista de todos, los cuidadores golpean a los animales con tubos de plástico, cuerdas, cadenas y látigos, para que sigan moviéndose.
2.Los animales son forzados a transportar turistas en caminos de 6 millas, bajo el sofocante calor, sin agua ni sombra. Repiten este viaje una y otra vez, hasta que cae la noche.
Los asnos son forzados a acarrear gente a través de los 900 desgastados escalones, hasta el icónico monasterio de la ciudad. Si se resisten o dan un paso en falso, las golpizas los impulsarán a seguir adelante. En un video con testigo de PETA Asia, un cuidador patea violentamente a un asno en la barriga cuando el animal se rehúsa a acarrear a más turistas después de haber terminado un recorrido anteriormente.
3.Muchos de los animales tienen heridas causadas por las cadenas y cuerdas con las que son atados de manera apretada.
Un testigo de PETA Asia vio camellos siendo forzados a trabajar, inclusive cuando tenían heridas infestadas de moscas causadas por bridas demasiado apretadas. Los asnos fueron avistados con cadenas alrededor del cuello y manchados de sangre de sus propias heridas.
4.Las autoridades locales no hacen nada para terminar con el descarado maltrato de animales.
Los turistas son enviados a la Región de Desarrollo y Turismo de Petra para reportar la crueldad hacia los animales, enviando un mensaje a una dirección de correo electrónico que no funciona.
En un artículo reciente del Jordan Times, el ministerio de turismo declara que la crueldad hacia los animales es tomada con mucha seriedad e inclusive cita la ley penal de Jordania. Pero no se ha hecho nada al respecto. Absolutamente nada.
5.Las autoridades de Jordania pueden terminar con este sufrimiento ahora mismo, pero no lo hacen, y no lo harán hasta que se les exija.
El ministerio de turismo y antigüedades del país, debe suplantar a los animales maltratados con transporte ecológico y libre de crueldad. Al igual que en otros sitios de la UNESCO, en los que no se maltratan animales, los turistas podrían apreciar Petra y su rica historia, sin apoyar el maltrato animal, lo cual arruina el viaje, y mancha la reputación del país.
PETA Asia le ha escrito a cientos de agencias de viajes y hoteles en el área para pedir su ayuda. Su respuesta ha sido clara: No promoverán a Petra hasta que sus animales sean suplidos por transporte que no los lastime.
Ningún animal cargaría a humanos a través de 900 escalones de manera voluntaria y bajo el sol abrasador. Solo lo hacen porque tienen miedo de ser lastimados si se niegan. Estos seres pensantes y sensibles, quienes además tienen emociones, personalidades y valoran sus vidas tanto como la hacemos nosotros, deben ser liberados de su sufrimiento.