Los asnos son animales pacientes, bondadosos e inteligentes. Pueden reconocer los rostros de animales que no han visto en años, y sienten dolor y miedo como cualquier otro animal. Pero en todo el mundo, los asnos explotados por los humanos están sufriendo cuando se los usa para trabajar, entretener e incluso para medicina tradicional.
Los asnos y las mulas son obligados a transportar cargas pesadas, prácticamente sin respiro de las condiciones climáticas extremas e incluso les niegan acceso al agua. Se ven obligados a soportar el peso de quienes los montan, a quienes no pueden transportar de manera segura o cómoda, y muchos animales sufren heridas profundas y abrasiones por sillas de montar inadecuadas. Debido a que están irritados constantemente por el equipamiento, las heridas no pueden sanar adecuadamente, lo que puede provocarles dolor a largo plazo. Pero en vez de recibir tratamiento por sus lesiones, los animales son forzados por sus dueños a continuar trabajando, quienes claramente anteponen el lucro sobre el bienestar.
Desde los paseos en elefante en Tailandia hasta los carruajes tirados por caballos en Cartagena y el nado con delfines en Cancún, los animales en destinos turísticos de todo el mundo son tratados como accesorios vivientes, privados de una vida real y se los somete a la servidumbre por dinero. Los monos bebés y los cachorros de tigre son separados de sus madres para ser usados para manipularlos y usarlos como accesorios fotográficos, los delfines son confinados en diminutas piscinas de concreto y obligados a nadar con humanos, los elefantes viven encadenados cuando no son obligados a pasear gente. Estas crueles compañías permanecen a flote solo porque los turistas humanos invierten dinero en ellas, y tú tienes el poder de acabar con ellas si eliges gastar tu dinero en otro lado.
Nunca financies ninguna de estas atracciones con animales, ni ninguna instalación que afirme “proteger” a los animales, pero los usa por dinero (cuidado con las instalaciones que agregan la palabra “santuario” o “rescate” a sus nombres, la mayoría son estafas, puedes consultar PETA.org/VacationTips para conocer los reales).
El exposé de PETA Asia en la antigua ciudad jordana de Petra reveló el maltrato a los 1.300 caballos, asnos y camellos que transportan turistas por la Ciudad Perdida.
Ya sea en Petra, Santorini, Cartagena, Perú, Chile, México o Arizona, los animales usados para paseos turísticos en asnos están siendo explotados a cambio de dinero: son arrastrados y obligados a padecer el peso insoportable de humanos, carruajes y equipaje de turistas. El exposé reveló que los animales eran golpeados con tubos, cuerdas, cadenas y látigos, y trabajaban todo el día, sin agua ni sombra.
Según las recomendaciones veterinarias, los asnos no deberían cargar más del 20% de su peso corporal, unas 110 libras. Pero los dueños, motivados por el lucro, que explotan a los asnos como “animales de trabajo” a menudo permiten que los monten personas más pesadas, lo que ejerce una gran presión sobre la espalda y articulaciones de los animales. Esto tiene graves consecuencias para los asnos. Si están demasiado débiles para continuar con su “trabajo”, a menudo son abandonados y los dejan morir.
Los asnos en la industria turística son obligados a trabajar en condiciones horrorosas:
Sin embargo, a pesar de esto, los turistas siguen participando en esta forma cruel de maltrato animal mientras las autoridades locales no hacen nada para poner fin al lucrativo negocio de los paseos en asnos.
Es posible que veas letreros en los destinos turísticos que afirman altos estándares de bienestar animal, pero son falsos y existen para aplacar a los turistas. Puedes evitar poner dinero en los bolsillos de los maltratadores de animales si te alejas por completo de estos paseos.
Los asnos acaban pagando el precio de tu entretenimiento:
Debido a las cargas extremadamente pesadas que tienen que transportar durante su vida, la mayoría de los asnos sufren graves problemas de espalda y, a veces, les provocan lesiones irreversibles en la médula espinal. Cuando se considera que ya no son rentables dadas sus lesiones o edad, los manejadores generalmente los abandonan y los dan por muertos.
Qué puedes hacer:
¡Viaja de forma responsable y no financies este maltrato! Los asnos no deberían usarse como atracciones turísticas, accesorios o medios de transporte. Hay muchas formas compasivas de entretenerse durante las vacaciones que no involucran trampas para turistas que explotan a los animales.
Haz clic aquí para ver cómo ser un turista compasivo:
CÓMO NO SER MALO CON LOS ANIMALES CUANDO VIAJAS
