La orca Amaya, de seis años de edad, ha muerto en SeaWorld y un informante le dijo a PETA que su muerte pudo haberse evitado.
Cuando Kyara, de 3 meses de edad (la última orca nacida en SeaWorld), murió, PETA e innumerables simpatizantes instaron a la empresa de parques marinos a que dejara de retrasar la construcción de santuarios costeros para las demás orcas atrapadas en sus tanques parecidos a celdas. Cuando Kasatka murió (un exentrenador de SeaWorld llamó a su aparente deterioro “una increíblemente dolorosa forma de morir”), renovamos una vez más nuestro llamado a SeaWorld de unirse al programa de santuarios costeros, al igual que lo hicimos después de la muerte de la orca Kayla en 2019. Pero SeaWorld ignoró a los cientos de miles de personas que les imploraron mejorar (al igual que ignoró la oferta de un cuarto de millón de dólares de PETA en 2020 para financiar la construcción de un santuario costero). Ahora Amaya también está muerta y los estrechos tanques de la compañía de parques abusivos y el personal aparentemente incompetente podrían tener que ver con su muerte en SeaWorld San Diego.
'Sudden and unexpected:' SeaWorld San Diego's youngest orca dead https://t.co/hg5YQyrdc5 pic.twitter.com/DHaaeLINWc
— New York Post (@nypost) August 20, 2021
El 19 de agosto, cuando SeaWorld confirmó que Amaya había muerto, PETA ya había presentado quejas al Departamento de Agricultura de Estados Unidos a principios de esa semana, solicitando una investigación tras recibir dos reportes de informante sobre un incidente que podría haber causado su muerte. Si los reportes del informante son ciertos, ella murió tan solo días después de que los trabajadores colocaran a las 10 orcas juntas, a pesar de su documentado historial de agresión entre ellas, lo cuál llevó a que Amaya persiguiera, rasguñara e hiriera a la orca mucho más anciana, Corky, quién podría haber tomado represalias durante la noche.
“[La muerte de Amaya] pudo haberse evitado si la gerencia no hubiera puesto a las 10 [orcas] juntas”, dijo el informante a PETA, diciendo, “Vayan a ver a Corky y todos sus rasguños frescos hechos por la ahora difunta… Amaya”.
Ahora PETA está exigiendo una investigación externa completa para saber si la incompetencia de SeaWorld dejó a Corky herida y a Amaya muerta con tan solo 6 años de edad.
Nacida en SeaWorld San Diego en 2014, Amaya solo conoció una celda de concreto como hogar. Su padre probablemente era Ulises, quien se apareó con Kalia (cuya madre era Kasatka) en SeaWorld San Diego, pero Kalia también fue violada vía inseminación artificial para asegurar que quedaría embarazada antes de dar a luz a Amaya. Ya que no existe un análisis de ADN independiente para probar la paternidad y los veterinarios anteriormente aseguraron que Ulises era infértil, se ha alegado que Kalia fue inseminada artificialmente con el semen de otra orca –posiblemente Tilikum, cuya muerte en 2017 provocó el movimiento #EmptyTheTanks– o cruzada con su hermano Nakai.
Amaya, una orca de seis años, acaba de morir en un tanque de #SeaWorld, probablemente por incompetencia.
— PETA Latino (@PETA_Latino) August 23, 2021
Las orcas hembras pueden vivir hasta 80 años explorando el océano con sus familias, pero en @SeaWorld están confinadas en tanques estrechos de concreto. 💔 pic.twitter.com/4EKNem75zM
Cuando las dejan vivir en paz en el océano, las orcas hembra pueden llegar a vivir por hasta 80 años, pero Amaya, Kayla (de 30 años), Kasatka (de 42 años), y Kyara (de 3 meses) –las orcas hembra que han muerto recientemente en un tanque de SeaWorld– murieron por debajo de su expectativa natural de vida. “Cuarenta orcas han muerto bajo la supervisión de SeaWorld”, anunciamos en julio de 2017. “Es hora de que el abusivo parque traslade a los animales restantes a santuarios costeros antes de que el índice de muertes llegue a 41”. Poco antes de un mes más tarde, Kasatka se convertiría en la orca número 41 en morir en SeaWorld. En 2019, Kayla se convirtió en la 42.
Amaya –la 43.º orca que murió en SeaWorld– no merecía ser una víctima del ciclo de abuso y muerte de la empresa de parques marinos. Ninguna de ellas lo merecía.
Amaya, una orca de seis años, acaba de morir en un tanque de #SeaWorld, probablemente por incompetencia.
— PETA Latino (@PETA_Latino) August 23, 2021
Las orcas hembras pueden vivir hasta 80 años explorando el océano con sus familias, pero en @SeaWorld están confinadas en tanques estrechos de concreto. 💔 pic.twitter.com/4EKNem75zM
Mientras que PETA presiona por una investigación completa e independiente sobre estas perturbadoras acusaciones de informantes, tú también puedes expresarte por las demás orcas prisioneras en SeaWorld. Es demasiado tarde para Amaya y las demás, pero para Corky, Ulises, Kalia, y muchas más, debemos instar a SeaWorld a acabar con sus décadas de tormento a orcas:
DILE A SEAWORLD QUE VACÍE LOS TANQUES