Actualización: Princesa, ahora conocida como Ellie, tiene finalmente su palacio. La exuberante pit bull que fue rescatada de un asqueroso y deteriorado corral en un área rural en Virginia, ha sido adoptada por una pareja con otra perra, Reba, que también fue adoptada de la SPCA de Virginia Beach. Así que, además de dos humanos cariñosos, Ellie tiene una hermana canina con quien jugar.
En cuanto a la antigua propietaria de Ellie, tiene un problema real. Después de que los resultados de la necropsia revelaran que la compañera de Ellie, Gigi, murió de una enfermedad avanzada de parásito del corazón y una infestación de gusanos severa no atendida, la mujer se declaró culpable de nueve cargos de crueldad hacia los animales y ha sido sentenciada a 30 días de cárcel y a tres años de libertad condicional y, lo mejor de todo, ¡se le ha prohibido poseer cualquier otro animal de por vida!
Publicado originalmente el 28 de noviembre del 2017:
En agosto, cuando la profesional de Dancing with the Stars, Sharna Burgess, pasó un día con los trabajadores de campo de PETA del Proyecto Comunitario de Animales, PETA llamó a la policía debido a una mujer de Boykins, Virginia. Sus dos pitbulls estaban en el techo de la perrera proporcionada por PETA porque su corral estaba tan sucio que no querían permanecer en el suelo.
PETA había estado supervisando a las perras, Gigi y Princesa, durante años, haciendo lo que podíamos por ellas, reemplazando el agua fétida que bebían por agua fresca, proporcionándoles comida, tratándolas para las pulgas y limpiando su corral, encontrando resistencia por parte de su poco colaboradora propietaria en cada paso del camino. A regañadientes nos permitió proporcionar a las perras una casa para perros adecuada para protegerlas del helante frío sólo después de que apeláramos con el alcalde de la ciudad para que interviniera, rechazando categóricamente las repetidas ofertas de brindarles la oportunidad de encontrar un hogar amoroso donde pudieran vivir dentro de una casa, como todos los perros deberían vivir.
En lugar de mejorar las condiciones de vida de las perras, su dueña simplemente colgó lonas en la cerca de alambre del corral con la intención de que los vecinos preocupados por ellas no las vieran. Peor aún, Gigi a menudo estaba atada con una correa de 4 pies de largo para evitar que se escapara del corral.
Después de que la policía la acusó de crueldad hacia los animales (su juicio estaba programado para enero del 2018), PETA continuó revisando a las perras, preocupados de que la dueña no mejoraría su cuidado, inclusive con la amenaza de una condena por crueldad. Teníamos razón.
En menos de dos semanas después, posteriormente de que reportáramos a la policía que teníamos razones para creer que las perras no habían sido atendidas durante varios días, los oficiales fueron a la propiedad y encontraron a Gigi muerta. (El informe de la necropsia estaba pendiente.) Eso llevó a control de animales a confiscar a Princesa, y la acogimos aquí en el refugio de PETA en Norfolk, Virginia, donde encantó a todos con su contagioso espíritu.
Un Juez otorgó la custodia permanente de Princesa a PETA, y la transferimos a la SPCA de Virginia Beach, un refugio con alta demanda y admisión abierta con el que solemos asociarnos. Después de años en un corral sucio y precario, Princesa finalmente tuvo la oportunidad de ser tratada como la realeza.
¿Qué Puedes Hacer?
Comprométete a nunca dejar a tu perro afuera