Amber Rose Barnes de Montana publicó con orgullo una foto en Facebook de sí misma posando y sonriendo con el cadáver de un perro que asesinó en el bosque y desolló. Mató a alguien pensando que era un cachorro de lobo y mostró el cuerpo muerto y destrozado de su víctima para que el mundo lo viera.
(Advertencia: imagen gráfica)
Barnes renunció a ese argumento en el momento en que se dio cuenta de que había asesinado a un perro. Cuando el público la condenó, afirmó que había matado al animal en defensa propia, pero no le creemos. Como señaló un comentarista en Twitter, estaba bien equipada con un arma ruidosa y otro equipo de caza para asustar a un perro o un lobo si se hubiera sentido amenazada.
Parece mucho más probable que Barnes haya matado a este perro a sangre fría: en su primera publicación, se refiere a la guerra contra los lobos en Montana, en la que los cazadores mataron al menos 273 lobos grises el año pasado, y no menciona que tenía miedo por su vida.
Lobos: Iguales a los perros, iguales a los humanos
Barnes y otros cazadores claramente no tienen reparos en matar animales, sin importar cuán jóvenes sean: los cazadores en Montana e Idaho torturan a los lobos con trampas que les prensan las piernas y disparan a los cachorros mientras duermen en sus madrigueras. Debido al especismo, los cazadores creen que han cruzado una línea solo si matan a la especie canina equivocada.
Al igual que los perros, los humanos y muchos otros animales; los lobos experimentan dolor y depresión por la pérdida de un ser querido. Dado que los lobos se aparean de por vida, permanecen fieles a sus parejas y viven en manadas muy unidas en las que todos colaboran, matar aunque sea a un solo lobo arruina múltiples vidas. Es especista negar a otros animales el amor y la consideración que les damos a nuestros “mejores amigos”.
Para cualquiera que esté indignado por la idea de que Barnes haya matado y desollado a un husky, recuerda que este asesinato no habría sido correcto si hubiera matado a un lobo. El perro que ella mató fue un individuo que pasó por el mismo sufrimiento, miedo y dolor que iba a ser infligido a un lobo.
Detener la guerra contra los lobos
La oficina del alguacil del condado de Flathead está investigando a Barnes y su historia, pero mientras tanto, puedes poner de tu parte para poner fin a la guerra sangrienta contra los lobos grises, que traumatiza a los animales, destruye a sus familias y sus estructuras sociales, y amenaza a sus poblaciones cada vez más reducidas en EE.UU.
Envía un mensaje urgente a la Secretaria del Interior, Deb Haaland, pidiéndole que implemente protecciones de emergencia inmediatas para los lobos grises y que restablezca las protecciones federales completas para ellos en virtud de la Ley de Especies en Peligro de Extinción.
ALZA LA VOZ POR LOS LOBOS
