Hace más de 25 años, la intensa campaña de PETA contra General Motors logró fundamentalmente poner fin a la cruel práctica automovilística de estrellar a animales vivos contra paredes a altas velocidades como parte de las crueles y mortales pruebas de choque de autos. Era ciencia basura en ese entonces y es ciencia basura hoy.
Aun así, y a pesar de la existencia de modelos sofisticados sin animales, los experimentadores en China siguen sujetando a los animales abusados y aterrorizados a asientos de autos y estrellándolos contra las paredes hasta que sus cuerpos quedan ensangrentados, moreteados y destrozados.
PETA contactó al Research Institute for Traffic Medicine and Daping Hospital de China para instarlo a que deje de usar animales vivos en las crudas pruebas de choque de autos. No existen regulaciones en el país que requieran la realización de estos horribles experimentos.
Perros y cerdos vivos son pulverizados en estas pruebas, dejándolos con huesos rotos y severas lesiones internas antes de ser asesinados y diseccionados.
Según sus propias publicaciones, es claro que el Research Institute for Traffic Medicine and Daping Hospital de China ha conducido los siguientes experimentos violentos:
- Experimentadores colocaron a perros en un asiento rígido en forma de L en posición de humano sentado usando cinturones de seguridad de tela. Luego les fijaron un disco en la cabeza con cables de acero, les cosieron sensores en sus cabezas, les agarraron la cabeza por las orejas, golpearon el disco con un martillo (para que las cabezas de los perros giraran violentamente hacia atrás y les causaran latigazo cervical, cojera y dificultad para mover las extremidades) y los asesinaron y diseccionaron.
- Experimentadores ataron cerdos vivos a un trineo metálico durante ocho horas sin agua ni comida, les atornillaron un bloque de metal a la pelvis, insertaron electrodos en su abdomen, los estrellaron contra la pared (causándoles múltiples fracturas y graves lesiones en la columna vertebral, pelvis y órganos internos) y los asesinaron y diseccionaron.
- Experimentadores no les dieron comida a cerdos durante 24 horas ni agua durante seis horas, los ataron a un asiento de auto con cinturones de seguridad y sogas, los estrellaron contra la pared (causándoles fracturas severas, contusiones, heridas, hemorragias en órganos internos y la muerte inmediata a la mitad de los animales que fueron usados) y luego los diseccionaron.
Usar a los seres sintientes en pruebas de choque de autos es cruel, arcaico e injustificable.
Los cerdos y los perros tienen diferencias anatómicas fundamentales con los humanos. Las compañías de autos hace años se dieron cuenta de que este tipo de experimentos son inútiles y no nos revelan nada acerca de la experiencia humana en un choque de auto.
Actualmente, las compañías usan tecnología de avanzada (como estudios humanos clínicos, modelos de avanzada en computadora, imágenes médicas en 3-D y sofisticados maniquíes) para sus investigaciones de choque de autos. Otros investigadores también usaron cadáveres humanos y realidad virtual (muñecos digitales para choque) para el mismo propósito. En el siglo XXI, todas las compañías automotrices del planeta deberían ya haber adoptado estos métodos.
Ayuda a PETA a evitar que perros y otros animales sean usados en experimentos letales
PETA sigue trabajando para finalizar estas aberrantes pruebas de choque de auto en cerdos y perros. Los otros animales sienten alegría, aprecian la vida y sienten dolor al igual que nosotros.
Imagina entonces la realidad infernal que millones de animales experimentan cada día dentro de los laboratorios. Son mutilados, quemados, ahogados, los fuerzan a ingerir fármacos y son atormentados de otras maneras atroces antes de ser finalmente asesinados. Por favor, haz clic en el enlace a continuación y pronúnciate en contra de las pruebas en animales:
INSTA A AJINOMOTO, LA ENORME COMPAÑÍA DE MSG, A QUE PONGA FIN A LAS HORRIBLES PRUEBAS EN ANIMALES