El Kentucky Derby – y otras carreras similares – no son todos mint juleps y sombreros elegantes. Hay un trasfondo engañoso en cada grito por cualquier caballo forzado a competir; porque cada año, algunos caballos abandonados son metidos en remolques de ganado y transportados a mataderos en Canadá y México, donde sufren una muerte triste y horrible.
Because many race horses’ “careers" end in a slaughterhouse where they are turned into DOG FOOD & GLUE. pic.twitter.com/3h61Qj3ejn
— PETA (@peta) June 27, 2014
Incluso estrellas de las carreras de caballos pueden terminar en un matadero. Tomemos a Ferdinand, por ejemplo, el campeón del Kentucky Derby de 1986 quien fue matado en 2002 después de que sus días de cría en Japón habían terminado. Pero PETA está trabajando arduamente para ayudar a estos caballos más allá de sus carreras en el hipódromo:
Correr hacia la tumbaDespués de una vida llena de dolor, pocos caballos son jubilados a pastizales cuando dejan de ganar carreras o se lastiman. ? Todo porque los propietarios no quieren pagar por un caballo que no gana dinero.
Posted by PETA Latino on Wednesday, April 18, 2018
Cada año, casi 90,000 caballos estadounidenses soportan días de transporte en remolques estrechos a países donde la matanza de caballos es legal. Durante el transporte, estos animales no tienen acceso a comida, agua ni atención médica, a pesar de que muchos sufren lesiones durante el viaje. En este video, un testigo de PETA pone al descubierto el destino de estos caballos no deseados, desde la casa de subastas hasta el supermercado, subiéndose a un camión rumbo al matadero:
Muchos de estos caballos fueron animales de compañía o fueron utilizados en el deporte y han sido tratados con drogas que no son seguras para el consumo humano – a pesar de que su carne se exporta a países como Francia y Japón, donde la carne de caballo se considera un manjar. Estas escenas nauseabundas de una investigación hecha por testigos de PETA en un matadero de caballos, muestran a caballos descartados por la industria de las carreras, siendo masacrados y hechos pedazos:
Aunque es horrible, la razón detrás de la enorme cantidad de muertes es muy simple: la oferta y la demanda. La asombrosa cantidad de 130,000 caballos estadounidenses de todas las razas fueron matados en México y Canadá en 2015, sin embargo, criadores irresponsables continúan produciendo cientos de miles de caballos anualmente. Estadísticas del gobierno de hace algunos años muestran que la industria de las carreras de pura sangre enviaba a aproximadamente 10,000 caballos al matadero anualmente, lo que significa que la mitad de los 20,000 nuevos potros nacidos cada año han sido eventualmente asesinados por su carne. Estos caballos no solo están tratando de aventajar a los otros están tratando de huir del carnicero.
El trabajo de PETA está dando frutos
PETA sabía que la cría excesiva sin las disposiciones adecuadas de retiro continuaría provocando más muertes. Así que en 2011, le presentamos a The Jockey Club una propuesta detallada para implementar y financiar un programa de retiro para los purasangre: el Thoroughbred 360 Lifecycle Fund. Nuestra propuesta fue adoptada por la industria de las carreras y se convirtió en el modelo de financiación de la Thoroughbred Aftercare Alliance (TAA) de hoy en día.
PETA is working with the horse racing industry to help start the first industry-supported retirement program for horses. RT to help send horses to retirement – not slaughter! #KentuckyDerby pic.twitter.com/5c4dUW2w3x
— PETA Shares (@PETAShares) May 5, 2018
Pero no nos detuvimos allí. El año pasado, tras las crecientes preocupaciones de que la insuficiencia de fondos podría significar que algunos purasangre continuarían siendo vendidos en subasta y enviados al matadero en Canadá o México, concebimos una tecnología primera en su clase para terminales de apuestas de carreras de caballos: una pantalla emergente que les pide a los apostadores que donen una parte de sus ganancias al TAA. En un comunicado, el TAA reconoció que PETA buscó cero compensación por el concepto y dijo que está “entusiasmado con el potencial de esta tecnología para ayudar a los purasangre más allá de sus carreras en el hipódromo”.
La prueba está en los números
El número de caballos exportados desde los EE.UU. para la matanza ha disminuido de más de 130,000 en 2011 a 88,000 en 2017.
Ayuda a PETA a salvar a estos caballos
Puede que el Kentucky Derby de este año haya terminado, pero eso no significa que PETA dejará de trabajar para salvar la vida de estos caballos.
¿Nos ayudas? Es fácil: ¡haz clic en el botón para ayudar a otros caballos que están siendo enviados al matadero!