Después de que esta semana, activistas demostraran de manera dramática su postura en contra del Encierro de Toros en Pamplona, el alcalde de la ciudad, Joseba Asirón, expresó apoyo a la protesta.
“…este es un debate que más tarde o más temprano, tendremos que poner en la mesa. Por una razón muy sencilla, y es que hacer girar la fiesta en torno al sufrimiento de un ser vivo, en el siglo XXI, es algo que, como poco, nos tenemos que replantear”.
Decenas de personas de todo el mundo formaron parte de la protesta “sangrienta” contra las corridas de toros y el encierro de toros.
135 litros de sangre artificial, 75 baldes de color rojo brillante, 75 unidades de ropa interior, un montón de diademas con cuernos y activistas de al menos nueve países.
Estos fueron los ingredientes que se utilizaron para crear un espectáculo verdaderamente notable hoy en la plaza principal de Pamplona, con una multitud de manifestantes internacionales que se empaparon simultáneamente con “sangre” para señalar que el festival San Fermín anual de la ciudad es un “baño de sangre” para los toros.
HAPPENING NOW: 75 activists just drenched themselves in 'blood' in Pamplona to protest #SanFermin #PamplonaBloodbath pic.twitter.com/Rw47G5lYKS
— PETA UK (@PETAUK) July 5, 2016
PETA viene haciendo manifestaciones junto al grupo de derechos animales español AnimaNaturalis durante muchos años para organizar manifestaciones contundentes contra las corridas de toros y la posterior matanza en la plaza de toros. ¡Pero la de este año debe de haber sido nuestra protesta más gráfica!
Muchos de los manifestantes eran españoles compasivos que principalmente están en desacuerdo con la masacre de toros por simple entretenimiento en su país. Otros viajaron desde todos los rincones del mundo, incluyendo Australia, Rusia, Suecia y Reino Unido, para participar. De donde fueran, su motivación era la misma: pronunciarse por la compasión y en contra de la violencia de las corridas de toros.
La espectacularidad visual estuvo diseñada con el propósito de imitar a los parranderos borrachos – muchos de ellos turistas estadounidenses, australianos o británicos – que se bañan con sangría en el encierro de toros, sin saber que todos y cada uno de los aterrorizados animales que persiguen a través de las calles empedradas, morirán unos días después de ser apuñalados hasta su muerte, en una corrida de toros.
Se matan cincuenta y cuatro toros cada año en el festival de San Fermín. Sus muertes son prolongadas, dolorosas y se dan frente a una multitud burlona. Hombres armados (y ocasionalmente mujeres) clavan banderillas y varas una y otra vez, hasta que el matador apuñala al animal debilitado y ensangrentado con una espada, posando sobre su cuerpo agonizante y algunas veces cortándole las orejas o el rabo como trofeo.
Esta actuación es cruel y completamente desfasada con los valores de la España moderna y progresista en la que el 93 por ciento de los jóvenes no apoya las corridas de toros. No puede negarse el hecho de que los turistas extranjeros que acuden en masa a los encierros de toros todos los años son cómplices de este baño de muerte, aun ni siquiera soñando poner un pie en la arena de la corrida de toros.
Pero hay esperanza. En toda España cada vez más autoridades locales deciden actualizar sus leyes y prohibir las corridas de toros y otras “tradiciones” crueles en sus regiones. El movimiento antitaurino está tomando gran ímpetu.
Cómo puedes ayudar
Únete a nuestra campaña en la que solicitamos a los intendentes españoles – incluyendo al de Pamplona – la prohibición de las corridas. Queremos mostrarles a esos líderes que no necesitan las corridas para atraer visitantes a sus ciudades – en realidad es todo lo contrario.
Estamos reuniendo cientos de mensajes positivos presentando lo que la gente ama de España, desde la comida al vino, la arquitectura y la música, para entregarle a los políticos al final del verano y hacerles saber que pensamos que España es #Mejorquelascorridasdetoros!
