Treinta y ocho. Ese es el número de orcas que han muerto bajo el cuidado de SeaWorld.
Para mostrarle a SeaWorld que la sangre de estas 38 orcas está en sus manos, los simpatizantes de PETA realizaron una ‘muerte’ masiva protagonizada por 38 personas con bodypaint simulando “orcas” en la fuente de la Plaza de Panamá, en el parque Balboa en San Diego.
El anuncio de SeaWorld de que va a dejar de reproducir a la fuerza a las orcas para sus espectáculos no es suficiente: no hace nada por ayudar a los animales que están en este momento confinados en tanques diminutos, nadando en círculos desesperados y sin fin.