En un llamativo espectáculo, PETA Latino, Acho Sin Toros y Perú Antitaurino realizaron un performance frente al Ministerio de Cultura para instar al ministro, Ciro Alfredo Gálvez Herrera, a no incluir a los toreros en la nueva Ley del Artista, la cual será presentada próximamente en el Congreso. El principal objetivo de la nueva ley es reconocer el trabajo y los derechos sociales de los trabajadores del arte. La mayoría de la gente está de acuerdo en que las verdaderas obras de arte muestran creatividad, individualidad y talento. Apuñalar animales hasta la muerte nada tiene que ver con eso.
Mira el performance:
Incluso antes de entrar en la arena, los toros son apuñalados en la espalda. Una vez en el ruedo, los picadores a caballo continúan clavando lanzas en los músculos de la espalda y el cuello del toro. Las retuercen y encajan para asegurar la pérdida máxima de sangre.
El matador entra para asestarle la puñalada mortal cuando el toro exhausto ya está cerca de la muerte. Tras provocar algunas embestidas debiles del animal moribundo, el matador trata de matar al toro cortándole la aorta con su espada. Si falla, y solo logra mutilar aún más al animal, cambia su espada por una daga para tratar de cortarle la médula espinal.
El toro puede estar consciente pero paralizado cuando lo encadenan por los cuernos o el cuello y lo arrastran fuera de la arena. En un acto barbárico final, le cortan las orejas y el rabo como “trofeos”.
