¿Qué es el TEPT?
El trastorno de estrés postraumático (TEPT) es una afección que puede desarrollarse después de que una persona ha experimentado un evento angustioso. Aunque muchas personas piensan en eventos como una guerra o un desastre natural como desencadenantes del TEPT, la afección puede ocurrir después de experiencias adversas en la infancia, la muerte repentina de un ser querido, un procedimiento médico u otras situaciones.
Los síntomas del TEPT pueden surgir poco después de un evento o años después. Pueden incluir volver a experimentar el trauma (reviviscencias, pesadillas o pensamientos aterradores), tener pensamientos negativos o problemas de memoria, tener arranques de ira y/o dificultad para dormir y evitar lugares, objetos o sentimientos que recuerdan el evento.
El TEPT generalmente se trata con terapia conversacional, psicoterapias como la desensibilización y el reprocesamiento por medio de movimientos oculares, medicamentos o una combinación de estos. La evidencia ha demostrado que estas terapias son útiles, pero a menudo no llegan a quienes las necesitan.
¿Cuántas Personas Tienen TEPT?
Desafortunadamente, los datos de toda la población que monitorean la generalización del TEPT están desactualizados. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Comorbilidad de Harvard, realizada entre 1990 y 2002, el 3,6 % de los adultos de EE. UU. había experimentado TEPT en el año anterior, con una incidencia mayor en las mujeres (5,2 %) que en los hombres (1,8 %). Se estima que el 6,8 % de las personas había experimentado el trastorno en algún momento de su vida.
Un estudio más reciente, que se centró en la prevalencia del TEPT después de las pandemias, concluyó que su ocurrencia durante estos tiempos fue del 19,3 % para la población general, del 23,8 % para las personas que habían experimentado la infección y del 26,9 % para los trabajadores de la salud.
El Fracaso de Experimentos de TEPT en Animales
A pesar de décadas de experimentos en animales sobre el TEPT, ha habido pocas mejoras en la atención clínica de los seres humanos que padecen el trastorno y posiblemente ninguna como resultado de tales pruebas.
En algunos casos, los hallazgos de los experimentos en animales son contrarios a lo que los médicos observaron en humanos. Por ejemplo, los machos parecen ser mucho más vulnerables al estrés en los experimentos sobre el TEPT, mientras que las hembras son más resistentes, lo que contrasta con los hallazgos epidemiológicos que sugieren tasas más altas del TEPT en mujeres en comparación con los hombres.
De todas las cosas horribles que los experimentadores les hacen a los animales en los laboratorios, es fácil imaginar que cualquiera de ellas podría contribuir a una condición como el TEPT en los individuos afectados. Sin embargo, justo cuando crees que lo has visto todo, los experimentadores proponen horrores que están casi más allá de la imaginación.
Los ratones, ratas, peces y pájaros utilizados en los experimentos sobre el TEPT son asesinados cuando los experimentadores terminan de usarlos.
Pruebas del TEPT en Ratones y Ratas
Experimentos de TEPT en Peces Cebra
Los experimentadores también han intentado inducir el TEPT en peces cebra sensibles restringiéndolos, haciéndolos vivir en agua con temperaturas extremas, aislándolos de todo contacto social, hacinándolos con otros peces, exponiéndolos a depredadores, bajando el nivel del agua, colocándolos en recipientes pequeños con un sistema magnético para crear un vórtice giratorio en el agua y cambiando su tanque con frecuencia. Este tormento se repite una y otra vez durante semanas.
Carboneros Cabecinegro y Monos Sometidos a Experimentos Fraudulentos
Los experimentadores han capturado carboneros silvestres, los han puesto en aislamiento solitario y han reproducido los sonidos de sus depredadores para aterrorizar a estas sensibles aves. Otros han separado a los monos bebés de sus madres y han obligado a los bebés a vivir en completo aislamiento en un intento de simular el TEPT en primates. Afortunadamente, PETA ha puesto fin a algunos de estos horrores.
Se Necesita Investigación Relevante para los Humanos Acerca del TEPT
El TEPT puede variar de un humano a otro y varios subtipos del trastorno han sido identificados. El hecho de que los científicos no puedan comparar de manera confiable el TEPT en dos humanos socava aún más cualquier intento de sacar conclusiones provenientes de una especie completamente diferente. Es importante destacar que muchos síntomas del TEPT en humanos, como pensamientos intrusivos y reviviscencias, simplemente no pueden ser modelados en otros animales.
Los fondos deberían ser asignados a modelos de investigación más relevantes basados en los humanos.
Por ejemplo, los científicos que investigan el TEPT en humanos están recopilando datos de personas con el trastorno utilizando imágenes cerebrales avanzadas, genómica, registros de salud electrónicos, datos epidemiológicos y, en algunos casos, tejido post-mortem para comprenderlo mejor. La inteligencia artificial está ayudando a estos investigadores a detectar patrones complejos en los datos. Estudios recientes que utilizan estos métodos han llevado a la organización del TEPT en subconjuntos de síntomas vinculados a la conectividad neuronal, que pueden usarse para un tratamiento personalizado, el descubrimiento de que la regulación genética puede estar relacionada con el riesgo de sufrir TEPT de un individuo y la capacidad de predecir una nueva aparición del TEPT sobre la base de factores de salud previos. Estos métodos basados en humanos también se pueden usar para identificar nuevos biomarcadores del TEPT para que las personas puedan ser remitidas para tratamiento más temprano.
Es fundamental que los fondos se desvíen de los experimentos con animales y se destinen a brindarles a los humanos que experimentan TEPT un mayor acceso a la atención de la salud mental y a la detección y prevención de eventos de la vida que contribuyen al desarrollo de esta condición.
APRENDE MÁS SOBRE EXPERIMENTOS PSICOLÓGICOS EN ANIMALESPara un diagnóstico preciso de tendencias suicidas, depresión, problemas con el alcohol u otras enfermedades mentales, consulta a un profesional de la salud calificado. Si tienes una crisis o crees que puedas tener una emergencia, llama a tu médico o al 911 de inmediato. Si tienes pensamientos suicidas, piensas en lastimarte o te preocupa que alguien que conoces pueda estar en peligro de lastimarse, llama a la Línea Nacional de Prevención del Suicidio al 1-800-273-TALK (1-800-273-8255). Este servicio gratuito está disponible las 24 horas del día, los siete días de la semana, y cuenta con profesionales certificados en respuesta a crisis. Si te encuentras fuera de EE. UU., llama a tu línea de emergencias local de inmediato.