Las mujeres siempre han manejado PETA, desde su fundación en 1980 por nuestra presidenta, Ingrid Newkirk, y hasta el día de hoy, son mujeres las que ocupan siete de nuestros 10 puestos ejecutivos principales, incluyendo a los dos principales. Activistas, mujeres, fuertes, inteligentes y estratégicas constituyen nada menos que un 80 por ciento del total de trabajadores de PETA, y juntas, estamos cambiando el mundo para nuestras hermanas de todas las especies, siendo pioneras en investigaciones con testigos, persuadiendo a grandes corporaciones a cambiar sus crueles políticas, popularizando un estilo de vida vegano libre de crueldad, y mucho más.
Esto nos cuenta Tracy Reiman, una de las mujeres que dirigen PETA, sobre su trabajo:
Llegué a PETA a los 23 años, apasionada, idealista y llena de energía y entusiasmo. Hoy, 26 años después, sigo viniendo a trabajar sintiéndome de la misma manera, a pesar del espantoso maltrato que presenciamos cada día. Esto es en gran parte gracias a las mujeres en PETA que me orientaron, me alentaron y ayudaron en mi formación, en aquellos primeros días y todos los días desde entonces.
Cuando quedé embarazada a los 34 años, Ingrid y el resto de la dirección de PETA me apoyaron y alentaron completamente. Estaba ansiosa por involucrar a mi hijo. Fue a su primera manifestación cuando tenía apenas 4 años (¡y durmió todo el tiempo!). El año pasado, él y yo celebramos un gran logro: el cierre de Ringling Bros., una institución cruel contra la que nos manifestamos juntos desde que él era un bebé.
Habiendo sufrido acoso sexual fuera del lugar del trabajo, estoy muy agradecida por no haber sabido nunca lo que es trabajar en un entorno hostil. Nunca me sentí menospreciada, discriminada o preocupada por la gente a mi alrededor. Trabajo en un lugar donde la gente es respetada por sus pensamientos, ideas, creatividad y trabajo duro, y donde todos los días me siento motivada, por el trabajo, mis colegas, y para detener el sufrimiento animal.
Me convertí en una de las mujeres que dirigen PETA, primero como directora y luego como vicepresidenta ejecutiva, y me honra transmitir estos valores a la próxima generación de mujeres de PETA.
—Tracy Reiman, vicepresidenta ejecutiva
PETA es un lugar donde todos son alentados a opinar, a usar sus voces para ayudar a aquellos que son a menudo ignorados. Reconocemos que todos los negativos “ismos” (desde sexismo a especismo) comparten un denominador común de temor, ignorancia, explotación, opresión e intolerancia, y que la gente que quiere un mundo más justo debe trabajar para terminar con todos los prejuicios, y no solo los que afectan directamente a nuestra propia especie.
¿Quieres formar parte de esta fuerza impulsada por mujeres para un cambio?
Estamos buscando algunas buenas mujeres (¡y gente de todos los géneros!) para portar la antorcha de la revolución de los derechos de los animales. ¿Podremos contar contigo? Infórmate aquí sobre cómo unirte a nuestro equipo o involucrarte como voluntaria.