Escrito por Jennifer O’Connor
Desde la aparición de las primeras etiquetas de “orgánico”, los consumidores creen que ciertos productos son “mejores”. Pero los animales en las granjas típicas orgánicas y “ecológicas” a menudo pasan gran parte del tiempo confinados en galpones hacinados o gallineros llenos de barro, al igual que los animales en las granjas convencionales. En los próximos años, eso cambiará… un poco.
El Departamento de Agricultura de EE.UU., que no cuenta con autoridad para inspeccionar granjas por maltrato animal, acaba de emitir una nueva norma que requerirá que las granjas que producen carne y huevos orgánicos acaten normas de bienestar animal más estrictas.
A partir del próximo año, la norma prohibirá:
- Cortar los rabos de las vacas y partes de los picos de las gallinas
- Transportar animales enfermos, lesionados o discapacitados
- Mulesing en ovejas (cortar la piel y carne de sus patas traseras y ancas)
La norma también aclara el requerimiento de que los animales deban tener el suficiente espacio para pararse, echarse, darse vuelta, y estirar completamente sus extremidades. Las aves en las granjas orgánicas ahora tendrán acceso al exterior, pero se requiere que la industria le brinde a estos animales naturalmente curiosos e inteligentes, solo dos pies cuadrados de espacio, sin representar éste el suficiente espacio para deambular o poder expresar tipos de comportamiento naturales.
Mientras que esta norma brindará a los animales un módico alivio, la dura realidad es que los animales en granjas orgánicas podrán seguir estando intensivamente confinados y sujetos a inseminación forzada, a la pérdida de sus bebés, a mutilaciones sin analgésicos y a una muerte dolorosa y aterradora. No existen leyes federales que protejan a los animales en las granjas, y un exposé encubierto tras otro ha revelado que incluso bajo ciertas normas vigentes, los animales sufren terriblemente. Una investigación de un testigo presencial de PETA de un proveedor de cerdo “criado humanitariamente” para Whole Foods, vio que cerdos enfermos y muy lastimados fueron dejados durante semanas sin la atención veterinaria adecuada. El testigo también vio a trabajadores golpeando a cerdos que eran cargados hacia el matadero.
Estas nuevas regulaciones no harán nada más que confundir a los consumidores en la creencia de que los animales en las granjas orgánicas no sufren cuando son usados para carne, productos lácteos y huevos, algo que no puede estar más alejado de la verdad. Estos alimentos nunca pueden ser “humanitarios”. Sé vegano y nadie tendrá que sufrir y morir para tu comida. Solicita tu kit vegano para principiantes gratuito, hoy.