El sábado 30 de abril, el padre de Justin Bieber ofreció una fiesta en Toronto, Canadá. En un intento por divertir a los invitados de la fiesta, tuvo en el evento a un tigre y a otros animales, quienes aparentemente fueron traídos desde el zoológico Bowmanville.
Lo que Justin y otros invitados de la fiesta probablemente no saben es que Michael Hackenberger, el dueño de ese zoológico, recientemente fue acusado en cinco instancias de crueldad hacia los animales debido a las grabaciones encubiertas de PETA, las cuales lo muestran azotando brutalmente a un joven tigre durante una sesión de “entrenamiento” y a continuación alardeando sobre esto. Hackenberger ha proporcionado tigres para películas como La vida de Pi y La Entrevista.
Los animales exóticos que son utilizados para el entretenimiento por lo general son separados de sus madres cuando son jóvenes, golpeados por los entrenadores para someterlos y obligados a vivir en recintos hacinados. Incluso pueden ser alimentados con sedantes de modo que sean dóciles durante los eventos y las fiestas como aquella a la que asistió Justin. A los tigres utilizados de esta manera se les niega todo lo que necesitan para ser felices, y solo podemos imaginar que el tigre con el cual posó Justin ha experimentado una vida de desdicha. Justin y los demás invitados tienen suerte de no haber sido atacados por los animales silvestres. En situaciones similares, ha ocurrido que los animales ataquen debido al estrés de sus desdichadas vidas.
Les estamos pidiendo a Justin y a su familia que nunca más utilicen animales como accesorios de selfis o como entretenimiento para fiestas.
Qué puedes hacer
Nunca poyes eventos ni fiestas donde se utilice a los animales para el entretenimiento, y exhorta a tus amigos y familiares a que hagan lo mismo. Cada dólar que se gasta en estos eventos y cada selfi que se toma con estos indefensos animales en cautiverio apoya el sufrimiento de los animales.