El otoño pasado, un hombre de 23 años llamado Joshua James se detuvo en la ventanilla de autoservicio de un restaurante Wendy’s en Florida para recoger su pedido y supuestamente arrojó un caimán de 3.5 pies dentro del restaurante.
Según los noticieros, las autoridades recientemente pudieron rastrear al hombre, detenerlo y levantarle cargos por asalto agravado con arma mortal, hurto y venta ilegal, posesión o transporte de un caimán. La ley estatal de Florida prohíbe matar, acosar o poseer caimanes.
Aunque James y sus padres dicen que sus acciones fueron una inofensiva travesura, el joven caimán probablemente estaba aterrorizado y confundido. ¿Puedes imaginar ser secuestrado de tu hogar por un extraño, ser transportado a un lugar que no conoces, ser arrojado varios pies por el aire y después chocar contra el duro suelo?
Al igual que los humanos y todos los demás animales, los caimanes pueden sentir emociones como el miedo, el dolor, la felicidad y la tristeza. No son objetos, ¡y no quieren ser utilizados en la “travesura” de alguien!
Qué puedes hacer
Lamentablemente, en las universidades y en otros lugares, personas crueles tienen un historial de usar animales como accesorios para “travesuras”. Si alguna vez ves a alguien maltratando a un animal o sabes de los planes de alguien para utilizar un animal en una travesura, contacta inmediatamente a la policía local. Si las autoridades no responden, contacta a PETA.
P.D.: Para visitar un autoservicio sin lastimar a ningún animal, ¡revisa nuestra guía para comer vegano en Wendy’s!
¡Corre la voz! Los animales no son nuestros para utilizarlos como juguetes.