Una reciente Encuesta Marista encuestó a 868 adultos en Nueva York, y los resultados mostraron que un abrumador 91% de los encuestados informó que nunca va a los hipódromos de ese estado para apostar en eventos de carreras de caballos en un año normal. Solo el 5% informó que va una vez al año, el 1% informó que va dos veces y el 3% informó que va tres o más veces. Los informes sugieren que los resultados de la encuesta reflejan una disminución general en la asistencia a los hipódromos de Nueva York.
Aun cuando el interés por las carreras disminuye, el bienestar corporativo continúa
Miles de millones en impuestos a los casinos, que podrían financiar sectores comerciales en crecimiento; educación u otras organizaciones que prestan servicios a la mayoría de los neoyorquinos, financian este fracasado negocio privado de juegos de apuestas, cuyos propietarios, entre otros, pertenecen a algunas de las familias más ricas del mundo. En los últimos cuatro años, se destinaron mil millones de dólares en subsidios a los 11 hipódromos del estado y, a través de premios en efectivo (pozo), a los bolsillos de multimillonarios como el jeque Mohammed bin Rashid Al Maktoum.
Los caballos siguen muriendo en los hipódromos de Nueva York
¿Qué ha hecho la Comisión de Juegos del Estado de Nueva York en respuesta a la muerte de 71 caballos en lo que va de 2021? No lo suficiente.
¿Qué pasaría si varios jugadores de los Yankees de Nueva York murieran en el campo de béisbol todos los meses? ¿Qué pasaría si decenas de jugadores de fútbol de los New York Jets sufrieran heridas fatales en las sesiones de práctica? ¿Cómo responderían los funcionarios estatales? Tomarían medidas inmediatas y decisivas para detener la masacre.
Los caballos son animales inteligentes y empáticos que no deberían ser forzados a sufrir y morir. Si la industria no puede mantener vivos a sus “atletas”, las carreras deben terminarse. Los funcionarios estatales no han hecho todo lo posible para detener las muertes, a pesar de las simples recomendaciones para salvar vidas y generar mejoras en la industria propuestas por PETA, y los pedidos para proteger a los caballos de más de 100.000 personas preocupadas por los animales.
Qué puedes hacer
Dile, por favor, a la Comisión de Juegos del Estado de Nueva York que actúe ahora para evitar que más caballos mueran en los hipódromos del estado.
¡ACTÚA POR LOS CABALLOS!