Cada año, se lleva a cabo un primitivo baño de sangre en los encierros de San Fermín en Pamplona, España, y la mayoría de las personas no lo saben. Muchos de los turistas que visitan la ciudad durante el festival no se dan cuenta de que los mismos toros que se resbalan y deslizan por las calles empedradas, son luego torturados hasta la muerte en la plaza de toros durante las corridas. En total, en las fiestas de San Fermín, al menos 60 toros son apuñalados brutalmente hasta morir. Esta es su historia:
El encierro
En los encierros de toros anuales de los Sanfermines, los organizadores hacinan a los toros y cabestros en corrales con gente bulliciosa alreadedor, y luego los liberan en las calles.
Los toros, presos del pánico, se reúnen en busca de seguridad con los cabestros, que han sido entrenados para guiar a la manada hacia la plaza de toros, mientras una multitud aterradora de corredores (la mayoría de ellos turistas) los persigue.
Los animales a menudo pierden el equilibrio en las esquinas y se estrellan contra las paredes, a veces fracturándose huesos.
Después de ser perseguidos unos 800 metros a través de calles estrechas cuesta arriba, los toros son acorralados en la plaza de toros. Los mantienen allí hasta las corridas de toros de la tarde, que, sin que muchos de los que participan en la carrera lo sepan, casi con seguridad resultarán en una sentencia de muerte violenta para cada uno de ellos.
La corrida de toros
La crueldad que se describe a continuación no es exclusiva de las fiestas de San Fermín. Se estima que el año pasado, al menos 7.000 toros sufrieron este horror en las plazas de toros españolas.
Una típica corrida española comienza cuando el toro entra en la arena y los toreros se le acercan. Desde el primer momento, los toreros empujan al toro hasta el agotamiento, haciéndolo correr de un extremo a otro de la arena.
Una vez que el toro está fatigado, un hombre, montando un caballo con los ojos vendados, entra en la arena. Clava una lanza en la espalda del toro, haciendo sangrar al animal. La pérdida de sangre está destinada a asustar y debilitar al toro a medida que más hombres entran a pie y le clavan banderillas (varas con un arpón en una de las puntas) hacia la parte superior de su espalda, causándole un dolor agudo cada vez que gira la cabeza.
La ejecución
Cuando el toro está fatigado, por la pérdida de sangre y el implacable hostigamiento, el matador hace su aparición final. Después de provocar en el toro exhausto algunas arremetidas, busca matarlo clavándole una espada entre sus omóplatos llegando hasta su corazón.
Si el toro no muere de inmediato, el matador usará una daga u otra arma para cortarle la médula espinal y finalmente matarlo.
Muchas personas que asisten a las corridas de toros quedan horrorizadas por lo que ven y, de haber sabido lo violento que sería, nunca habrían comprado un boleto. La única forma de cerrar esta industria abusiva es negándose a apoyarla completamente.
Lo que puedes hacer por los toros
Año tras año, más españoles expresan su oposición a las crueles corridas de toros. En 2018 se redujeron las corridas de toros oficiales en aproximadamente un 56% menos que en el año 2007. Pero los amantes de la adrenalina no se dan cuenta de que correr con los toros significa participar en unas fiestas en las que los animales son torturados hasta la muerte como se muestra en este video grabado en la primera corrida de este año:
BREAKING: Activists leap into bullring in Pamplona to protest cruel, barbaric bullfights on the first day of San Fermin festival. #SaveTheBulls pic.twitter.com/SRdoFhXYz2
— PETA UK (@PETAUK) July 6, 2019
Por favor, no contribuyas a la tortura y asesinato de estos majestuosos animales y ayúdanos a terminar de una vez por todas con las corridas y encierros de toros. Aléjate de las fiestas de San Fermín.
Ayúdanos a terminar con los encierros