Corchos virtuales (y a lo mejor algunos reales) están volando en PETA, debido a una decisión del Servicio de Pesca Marina de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (National Oceanic and Atmospheric Administration, NOAA) de negarle el permiso al Acuario de Georgia para importar 18 ballenas beluga capturadas de la naturaleza en Rusia. Esto podría implicar el principio del fin de las espantosas exhibiciones de ballenas encarceladas en acuarios y parques marinos como SeaWorld, que hubiera adquirido algunas de las ballenas para cada una de sus instalaciones.
Estamos también brindando por los miles de ustedes que respondieron a las convocatorias a la acción de PETA durante la consideración de la solicitud por el Servicio de Pesca Marina de NOAA, así como a Kim Basinger, quien envió una fuerte apelación en nombre de PETA.
No hay excusas para la esclavitud
Entre las (excelentes) excusas dadas por Pesca Marina de NOAA para negarle la solicitud al acuario, figura la preocupación de la agencia en que al permitir la importación de belugas se podría dañar “la población de la cual esas belugas sean tomadas” y que “contribuiría a la demanda de captura de belugas de esta existencia, con el propósito de exhibirlas públicamente en los Estados Unidos y en el mundo” y que “cinco de las ballenas beluga propuestas para ser importadas, que se estima tienen 1 año y medio de edad al momento de la captura, estarían potencialmente todavía siendo amamantadas y no siendo todavía independientes”. Esperemos que las autoridades rusas tomen también una actitud decente y liberen a las belugas.
Gracias a la película Blackfish y a la demanda legal de PETA’s contra SeaWorld por violar el derecho a la libertad de las orcas bajo la Decimotercera Enmienda, la gente es ahora consciente del cruel estilo de captura tipo rodeo de las ballenas de sus manadas en el océano, y de cómo los humanos están en peligro (a veces fatalmente) por estar cerca de los animales cautivos que están fuertemente angustiados. Lo que es menos conocido (pero no menos atroz) es cómo las orcas macho cautivas son masturbadas por sus cuidadores para producir semen, que será usado para inseminar artificialmente a las hembras para parir bebés que podrán ser también después aprisionados y explotados.
Qué puedes hacer
El momentum está de nuestro lado, por tanto no podemos aflojar ahora: ayuda a PETA a mantener la presión sobre SeaWorld y sobre otros parques de animales marinos y acuarios, hasta que todas las ballenas naden en libertad.