Escrito por Craig Shapiro
¡Victoria para los animales! El mal afamado circo Cole Bros., cuyas habituales violaciones de las leyes federales de bienestar animal podrían llenar un fichero policial, va de mal en peor. El circo anunció recientemente que no estará de gira en el 2016.
Cole Bros. no ha cumplido ni siquiera con los estándares mínimos de cuidado de los animales según lo establecido por la Ley Federal de Bienestar Animal (AWA por sus siglas en inglés), y el Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA) ha citado legalmente al circo en repetidas ocasiones por privar a los animales del cuidado veterinario y de espacio adecuados, junto con otras violaciones.
El circo ni siquiera tiene una licencia para exhibir a los animales en este momento, así que los ha estado rentando del circo Carson & Barnes, otro mal afamado circo con su propia lista de violaciones a la Ley de Bienestar Animal. Sus entrenadores han utilizado sopletes y picanas eléctricas sobre los elefantes, y un entrenador encargado les dijo a sus discípulos que “los hicieran gritar [a los animales]”.
Pero fue la corte de la opinión pública la que pudo haber dado el veredicto más condenatorio.
En el 2015, después de que los miembros de PETA y del Long Island Orchestrating for Nature hicieron públicas sus preocupaciones acerca del largo historial de maltrato animal de Cole Bros., una manifestación organizada en Islip, Nueva York, se convirtió en una celebración después de que las autoridades de la ciudad se rehusaron a darle al circo un permiso para actuar. Ese mismo año, una campaña de petición de los residentes ayudó a persuadir al West Deptford Lions Club en Nueva Jersey para que cancelaran un espectáculo programado y se comprometieran a nunca más patrocinar a ningún circo que utilice animales.
No es sorprendente que un creciente número de ciudades y organizaciones le hayan dicho que no a Cole Bros.
En el 2011, el circo junto con su dueño y presidente, John Pugh, se declararon culpables de violación de la Ley de Especies en Peligro de Extinción por vender ilegalmente a dos elefantes asiáticos a un hombre que planeaba usarlos en fiestas privadas y paseos. En el 2000, Clyde Beatty-Cole Bros. (como se llamaba el circo anteriormente) recibió una penalidad civil de $10.000 dólares por parte del USDA para resolver los cargos por utilizar de manera abusiva un bullhook en elefantes. Los bullhooks son bastones pesados con un afilado gancho de acero en una de las puntas que puede rasgar la piel sensible de los elefantes. Estas son solo dos de las docenas de citaciones legales contra el circo y sus exhibidores.
Cole Bros. también tiene un historial de poner al público en peligro. En el 2004, un tigre escapó cuando estaba siendo transferido de una jaula a otra y corrió libremente por un parque cercano, haciendo correr a quienes hacían picnic. Los elefantes de Cole Bros. se han escapado en repetidas ocasiones, incluyendo a dos que salieron corriendo por Queens, Nueva York, desencadenando una reacción de pánico que dejó a 12 personas heridas. En otra ocasión, un elefante aplastó a un hombre hasta la muerte.
Qué puedes hacer
Los animales no son nuestros para usarlos como entretenimiento. Al rehusarte a comprar boletos para cualquier circo que utilice animales y al instar a las autoridades locales y a los lugares de eventos para que prohíban esos actos, podemos presionar a los circos para que en su lugar presenten solamente a actores humanos. Contacta a PETA para obtener ayuda.
