Animadores de Elisabeth Murray Celebran sus Crueles Experimentos en Monos

El escuadrón animador del tormento animal está en su totalidad defendiendo todos y cada uno de los experimentos en monos. Lo bueno es que a casi nadie le importa. La mayoría de la gente no es siquiera consciente de que existen organizaciones que están literalmente en el negocio de la promoción de los experimentos en animales –todos y cada uno de ellos– y las criticas a PETA. Ahora, el escuadrón animador ha defendido el atroz trabajo de Elisabeth Murray, vitoreando sus experimentos de terror en monos que infligen daño cerebral en estos animales y los asusta.

Atormenta y asesina monos, y la llaman ‘amorosa’ y ‘amable’

Esta no es la gente que elegirías para cuidar a tu gato mientras estás fuera de la ciudad.

“Betsy Murray es una persona maravillosa, brillante, amorosa y amable”, dijo alguien recientemente.

Resumiendo: “Betsy”, como la llaman sus amigos, extrae una sección del cráneo de un mono y le inyecta toxinas o le succiona porciones del cerebro, causándole daño permanente y traumático. Coloca a los monos en pequeñas jaulas de metal y los atormenta con arañas y serpientes falsas de aspecto realista, provocándoles los peores temores. Cuando termina, los mata.

Pero, según sus apologistas, esto es lo que una persona “amable” hace por un empleo remunerado.

¿En serio? ¿Es amable encerrar toda la vida en jaulas a seres nobles y sintientes, privarlos de todo lo que da sentido a sus vidas, negarles libertad de elección, someterlos a cirugías invasivas y dolorosas y usarlos en experimentos aterradores hasta que sus cuerpos quedan tan desgastados que solo la muerte los libera del tormento? Si esto es lo que la palabra “amable” significa para ellos, hay que preguntarse qué tipo de conducta considerarían mala.

El especismo es inherente a la experimentación animal

Los experimentadores en animales y sus partidarios no consideran que sea cruel lo que Murray hace a los monos, a pesar de la obvia ridiculez de esa afirmación. Para ellos, es solo “ciencia” porque no reconocen, como dicta la compasión, la autonomía inviolable que todos los seres sintientes poseen por naturaleza. Y eso es especismo de manual.

La experimentación animal ni siquiera funciona

Ningún ser vivo con sentimientos merece padecer la vida a la que Murray ha sometido a los monos. Y nosotros, como primates humanos, no tenemos derecho a asignarles algún tipo de vida. Gracias, pero pueden hacer esto muy bien por sí mismos.

Si los experimentadores carecen de empatía, podrían considerar que defender cada atrocidad cometida contra los animales en los laboratorios también es perjudicial para la ciencia, que es cuestión de evaluación objetiva. ¿Qué funciona? ¿Qué no funciona? Dejen de hacer lo que no funciona (ver el Acuerdo de Modernización de la Investigación de PETA para más información sobre el fracaso de los experimentos en animales y qué puede hacerse al respecto).

Murray ya lleva 30 años realizando estos horribles experimentos y en todo ese tiempo (y a pesar de los $47 millones de dinero de los contribuyentes que los financia), no han logrado ninguna cura ni tratamiento para los humanos. Es hora de hacer algo realmente amable y cerrar su laboratorio.

Por favor, tómate un minuto para leer más sobre los horrorosos experimentos de Murray que llevan décadas y actúa para cerrar el laboratorio que aterroriza a los monos.

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