La orca Lolita encarcelada puede haber ganado su aliada más poderosa.
Antes de que la separaran del seno de su familia hace 47 años, Lolita conocía el área del Mar de Salish en el estado de Washington como su hogar. La tribu Lummi aún lo hace, y ha aprobado una resolución unánime para que sea liberada del acuario de Miami – donde está recluida en régimen de aislamiento en el tanque para orcas más pequeño de América del Norte – y regresada a sus aguas nativas.
Supuestamente, el Tratado Point Elliott de 1855 otorga al pueblo Lummi el derecho legal de proteger sus tierras costeras, aguas y peces. Apoyada en este tratado, la tribu ha luchado con éxito contra poderosos enemigos que han querido utilizar partes de su territorio. Los miembros tribales podrían argumentar con éxito que Lolita califica para ser protegida bajo este tratado.
La tribu ha habitado el área del Mar de Salish durante 12,000 años, y la conexión espiritual de su gente con la tierra, las aguas y la vida silvestre de la región es profunda. Ahora están trabajando con biólogos marinos y el ex alcalde de Miami Beach Philip Levine, para que Lolita sea liberada y devuelta a su custodia y luego llevada a un corral marino protegido en las aguas en las que todavía habita su manada.
Los miembros del Consejo Empresarial de los Indio Lummi han estado tratando de reunirse con el presidente del Seaquarium de Miami, Andrew Hertz, pero hasta el momento él se ha rehusado. El miembro de la tribu Jewell James tenía este mensaje para el Seaquarium: “Mira, podemos hacer esto de buena o de mala manera. De buena manera, te hacemos un héroe. De mala manera, traemos todas nuestras coaliciones y todos nuestros aliados y te convertimos en un villano”.
PETA sigue demandando al Seaquarium bajo la Ley Federal de Especies en Peligro de Extinción para liberar a Lolita. Tú también puedes ayudar. Dile al parque que es hora de dejar que Lolita se vaya a casa.