Según una publicación de Facebook que se hizo viral, la cena tardía de Acción de Gracias de una familia se volvió trágica cuando nueve de los pericos enjaulados que tenían como compañeros animales, murieron de repente. La mujer que escribió la publicación afirma que las aves murieron luego de haber respirado los gases nocivos que emanaron de una bolsa plástica de cocción que envolvía a un pavo muerto, cuyo cuerpo se estaba cocinando en el horno de la familia.
Please share so anyone with a bird will know never to use these… I have 50+ birds from Parrots to Parakeets.. Never…
Posted by Ayesha El-Maghribi on Saturday, December 2, 2017
El mensaje de la familia fue compartido casi 30.000 veces en Facebook y alienta a todo el mundo con aves de compañía a tener cuidado con este pequeño peligro poco conocido. Las aves tienen sistemas respiratorios muy frágiles. Además de las bolsas de cocción (a veces llamadas “bolsas para asar” o “bolsas de horno”), los utensilios de cocina antiadherentes sobrecalentados y los hornos autolimpiantes también emiten gases que pueden ser mortales para las aves, y nunca deben ser usados en un hogar donde viven aves de compañía.
Cuidar a las aves es una responsabilidad de tiempo completo.
No son animales “de bajo mantenimiento”, y sus únicas necesidades son más difíciles de satisfacer de lo que la mayoría de la gente se da cuenta o considera antes de tomar la decisión apresurada de comprarlos. Como lo subraya esta historia, incluso la gente con experiencia con aves como “mascotas” podría estar dañando sin saberlo a los animales que consideran parte de su familia.
Muchas aves enjauladas son privadas de cosas que son importantes y naturales para ellas, como volar con sus compañeros de bandada, explorar y elegir a un compañero. Este estrés los puede deprimir o volverlos neuróticos, y algunos exhiben patrones de conducta de autodestrucción, como sacarse las plumas y mutilarse a sí mismos, a veces incluso hasta la muerte. Otros son abandonados después de que sus guardianes descubren que los tipos comunes de comportamiento de las aves (como llamar a la bandada, morder, masticar y escupir la comida) no se adaptan bien en muchos hogares de humanos.
Por favor, nunca compres ni regales un ave.
Si no te comerías a tu perico,
¿por qué comer un pavo?
Recuerda que incluso si estas nueve aves no hubiesen muerto trágicamente, habría una que no tuvo la posibilidad de sobrevivir: el pavo.
Millones de pavos son matados cada año solo para Acción de Gracias, y cada uno de ellos es capaz de sentir el mismo miedo y dolor que los nueve pericos que murieron en este incidente. Las líneas arbitrarias trazadas por los humanos no deberían dictar la consideración y compasión que les asignamos a varias especies de animales. Puedes mostrar que te importan TODOS los animales (no solo los que consideras “lindos” y que comparten tu hogar), rechazando contribuir a su sufrimiento y muerte en la industria de la alimentación. Comprométete a ser vegano hoy mismo y podrías salvar las vidas de más de 100 animales por año. Luego, mira los cientos de deliciosas recetas veganas que tenemos aquí en PETA latino.com:
