El International Science Consortium de PETA está financiando una investigación pionera que tiene como objeto evitar el uso de caballos, asnos y mulas de ser usados como fábricas vivientes para la producción de drogas llamadas antitoxinas, que son moléculas que combaten venenos generados por bacterias y otros organismos.
Las antitoxinas son medicinas vitales, pero la mayoría de las que están hoy en uso son hechas con sangre de caballos y de otros equinos quienes son inyectados reiteradamente con toxinas, a pesar de que existen métodos modernos que no usan animales. Sin anestesia, son sujetados mientras les extraen grandes volúmenes de sangre de una vena del cuello (hasta 15 por ciento de sangre a la vez, que puede ser tanto como 2 galones), y son sometidos a este maltrato una y otra vez.
Y no solo es el sangrado lo que son obligados a soportar. Una serie de inspecciones recientes de los establecimientos donde mantienen a estos animales, pusieron al descubierto terribles condiciones de vida. Muchos padecían anemia, cascos enfermos, anomalías en los ojos, infecciones, parásitos y malnutrición, y vivían en espacios hacinados, sucios, sin atención veterinaria adecuada.
Advertencia: este video contiene imágenes que pueden herir la sensibilidad de algunos espectadores.
Las antitoxinas han sido fabricadas de esta manera por más de 100 años, pero existe una manera mejor de hacerlo.
El Consorcio está aportando €134.000 (aproximadamente $144.000) a los expertos del Instituto de Bioquímica, Biotecnología y Bioinformática del Technische Universität Braunschweig en Alemania. Este financiamiento apoyará la creación de antitoxinas que podrán bloquear la toxina venenosa que causa difteria, una grave enfermedad que puede resultar en dificultad para respirar y generar fuerte daños a los riñones, al sistema nervioso y al corazón. Y lo mejor es que serán fabricadas en el laboratorio, sin hacer daño a ningún caballo.
Esta es una buena noticia para los humanos también. Las antitoxinas hechas con sangre de caballo no duran demasiado y pueden causar enfermedades en humanos, pero ambos problemas se evitarán produciendo las antitoxinas en el laboratorio.
Qué puedes hacer
La ciencia lo demuestra: en vez de hacer perder sangre, torturar e inyectar a los caballos, asnos y mulas con toxinas, los gobiernos deberían respaldar la producción de antitoxinas para seguridad de humanos y animales.
Insta al gobierno indio a cerrar establecimientos abusivos con los equinos