Según informes, en México, el senador Adolfo Gómez Hernández permitió la matanza ritual de una gallina en el Senado –acto considerado un “sacrificio” para un dios de la lluvia– por una sequía en curso. Las impactantes imágenes del acto se compartieron en las redes sociales, provocando una indignación generalizada tanto en México como en otras partes del mundo:
Las gallinas son individuos que sienten alegría, amor, dolor y miedo tal y como cualquier otro animal, y esta gallina murió llena de terror y agonía cuando le cortaron el cuello dentro del Senado en un acto ilegal que traicionó a la vulnerable gallina, a la Ley de Bienestar Animal de la Ciudad de México y la confianza de los ciudadanos, quienes dependen de las autoridades de elección popular para que se respete la ley.
PETA Latino exhorta al público en México y en cualquier otro país a que ayude a preservar sus diversas tradiciones y al mismo tiempo se deje a los animales en paz.
En un entorno natural, una gallina cloqueará a sus polluelos mientras aún están dentro de sus huevos. Ellos les pían en respuesta a ella y a los demás desde dentro de sus huevos. Las gallinas son madres devotas que sacrificarán su propia comodidad si eso significa proteger a sus polluelos.
El especismo, al igual que el sexismo, el racismo y otras formas de discriminación, es un sistema de creencias opresivo en el que quienes tienen poder establecen límites para justificar el uso o la exclusión de sus congéneres sintientes que son menos poderosos. Esta línea de “razonamiento” supremacista se usa para defender el trato hacia los animales como herramientas de investigación, comida, telas, juguetes u objetos para ser sacrificados para un ritual, a pesar de que comparten nuestra capacidad de sentir dolor, hambre, miedo, sed, amor, alegría y soledad, y tienen el mismo interés en disfrutar de la libertad y de vivir en paz como los humanos.
Puedes ayudar a poner fin al especismo
