Sunder solía estar aprisionado y solía ser maltratado. Ya no es así.
En 2007, cuando era solo un niño, Sunder fue dado como ofrenda a un templo en Kolhapur, India.
Allí, se le mantuvo encadenado en confinamiento solitario y sufrió maltrato rutinario.
Cuando PETA India se enteró de su difícil situación, Sunder tenía un ojo lesionado, un agujero en su oreja y cicatrices en todo su cuerpo debido al maltrato que había tenido que soportar en el templo.
PETA India comenzó a hacer campaña a favor de la liberación de Sunder.
Paul McCartney y Pamela Anderson se sumaron de inmediato al llamamiento para ayudar a Sunder.
En 2012, después de años de maltrato, Sunder trató desesperadamente de escapar.
Este es el pilar de concreto que derribó para liberarse.
Poco después del intento de escape de Sunder, las autoridades ordenaron que fuera liberado en un santuario, gracias a la labor de PETA India – pero sus captores se negaron a dejarlo ir.
En su lugar, lo escondieron en un viejo galpón avícola.
En 2013, PETA India divulgó imágenes de video impactantes de una paliza que recibió Sunder a manos de su cornaca, o manejador.
El video causó indignación mundial.
Cientos de miles de personas le escribieron a las autoridades exigiendo que Sunder fuera llevado a un santuario.
PETA India mantuvo la presión al reunirse con funcionarios y reclutando más celebridades para hablar a favor de Sunder, y el grupo incluso luchó por su liberación en el Tribunal Superior de Bombay y en el Tribunal Supremo de la India.
Y finalmente, el 5 de junio de 2014, Sunder comenzó su viaje hacia un lugar a salvo en el Parque Biológico Bannerghatta, donde se le pudo cuidar adecuadamente.
Cuando Sunder llegó al parque, no supo qué hacer con los otros elefantes.
No había estado rodeado por sus semejantes en mucho, mucho tiempo.
También tuvo que aprender a confiar una vez más en los humanos.
¡Las recompensas ayudaron!
Y tuvo que estar ligeramente sujeto mientras sus heridas sanaban.
Sin embargo, paulatinamente, Sunder hizo amigos, como Lakshmi…
… y el bebé Shiva.
Incluso comenzó a ser cariñoso con sus cuidadores.
Y comenzó a nadar…
… y nadar un poco más.
Incluso su pierna herida, un recordatorio de todos los años que pasó encadenado, ya ha sanado.
PETA India trabajó con el parque para cercar todo su perímetro de 122 acres para que Sunder y su familia de elefantes pudieran deambular libremente en lugar de estar encadenados (que es como los elefantes en cautiverio en la India se encuentran generalmente).
PETA India también está trabajando con expertos para organizar la capacitación de cuidadores locales sobre los principios del sistema contacto-protegido para manejar elefantes, que mantiene tanto a los humanos como a los elefantes seguros, al mantenerlos separados por una barrera sólida, y emplea las técnicas de estímulo positivo para manejar a los grandes animales en lugar del castigo físico.
La transformación física y emocional de Sunder es impresionante.
Mira la inspiradora travesía de Sunder:
¿Quieres ayudar a otros elefantes como Sunder? Haz clic aquí para ayudar a los elefantes ahora.