Los experimentadores del Centro Nacional de Investigación de Primates de Washington (Washington National Primate Research Center WaNPRC) de la Universidad de Washington (UW) parecen estar sintiendo la presión del público, gracias a nuestro video reciente que mostró por primera vez en la historia el interior de este hermético laboratorio. La UW no invita a la gente a ver a los monos, animales sumamente sociales y sensibles, quienes están confinados por años en jaulas del tamaño de un gabinete de cocina. Pero el video difundido en las plataformas de redes sociales, estaciones locales de televisión y vallas publicitarias móviles fue grabado por los mismos experimentadores hace solo pocos años.
En el video, puedes ver la devastadora realidad de la vida diaria de los monos: las jaulas pequeñas y desoladas; la falta de luz natural; y el sonido ensordecedor del metal contra el metal cuando estos monos desesperados y profundamente consternados caminan de un lado a otro o se lanzan contra los lados de las jaulas.
En su desesperación por excusar estos horrores, el WaNPRC publicó recientemente preguntas frecuentes intentando defender sus prácticas de alojamiento y enjaulado, pero sus “datos” son engañosos, débiles y poco convincentes. Quizás la mayor ironía es que por más de tres décadas, los científicos del WaNPRC han estado publicando artículos en los que reconocen que las jaulas y las condiciones en las que están los monos tienen profundos impactos negativos en el bienestar de los animales e incluso distorsionan los resultados de los experimentos. Un macaco enjaulado no es un modelo representativo de la fisiología, inmunología o comportamiento normal de los humanos.
En la naturaleza, los macacos viven en grupos grandes, con jerarquías rigurosas y una fuerte concentración en las relaciones sociales. Los macacos bebés son adorados y las hembras permanecen en su grupo de nacimiento de por vida. Los macacos recorrerán varias millas al día a través de hábitats complejos y diversos, donde su inteligencia, dedos ágiles y habilidades para trepar y nadar les permiten explorar y buscar frutas, bayas, frutos secos, hojas, insectos, raíces, brotes y más. Cuando paran durante el día para descansar, el acicalamiento es común entre los adultos mientras los animales más jóvenes juegan. En la noche, la tropa regresa a su árbol preferido para dormir, donde encuentran seguridad y refugio al juntarse. Esta extraordinaria flexibilidad ecológica y conductual, igualada sólo por la nuestra, les ha permitido a los macacos expandirse por el mundo.
Los machos adultos tienen aproximadamente el mismo tamaño que un niño de 2 años. En el WaNPRC, los macacos están confinados solos en jaulas de 3 pies de altura con menos de 6 pies cuadrados de piso. Un posadero de metal hecho con dos tubos de acero está ubicado a un pie por encima del piso de alambre. Pueden darse la vuelta dentro de las jaulas, y nada más. Las macacas, que son un poco más pequeñas, son rutinariamente separadas de sus bebés poco después del nacimiento. Lo único que es peor que estar en una jaula en el WaNPRC es estar sola en una jaula después de que te han quitado a tu bebé.
Es hora de verificar las afirmaciones del WaNPRC acerca del alojamiento y el enriquecimiento ambiental de los monos.
Afirmación #1 del WaNPRC: En el WaNPRC contamos con un dedicado equipo de manejo del comportamiento que trabaja en estrecha colaboración con nuestros equipos de veterinarios y cuidadores para proveerles a nuestros animales la mejor atención posible.
La verdad: no menciona que las crisis financieras sistémicas reportadas han llevado a tomar medidas draconianas de reducción de costos. El equipo de manejo del comportamiento del WaNPRC ha sido desmantelado en los últimos tres años y está falto de personal. Tras las jubilaciones, los despidos, los déficits financieros y la dificultad de hallar personas dispuestas a observar diariamente el dolor, el miedo y la desesperación de estos monos enjaulados, cada vez hay menos personal disponible para observar y/o diseñar intervenciones para disminuir los problemas conductuales crónicos, tales como arrancarse el pelo por estrés, morderse y tener comportamientos estereotípicos. Y los monos siguen solos en jaulas estrechas.
Afirmación #2 del WaNPRC: El alojamiento social es la ÚNICA condición de alojamiento para TODOS los animales. Mantenemos las tasas de socialización por lo menos en 80% o más cada mes.
La verdad: el problema está en los detalles. Seattle tiene entre 400 y 500 macacos en sus laboratorios subterráneos carentes de ventanas. La inmensa mayoría de estos monos están en protocolos experimentales activos: están siendo utilizados en experimentos y no incluidos en ese 80%. Los vivisectores del WaNPRC son un grupo notablemente arcano, y a pesar de las innumerables publicaciones de los últimos 30 años que muestran que el alojamiento individual causa variaciones fisiológicas e inmunológicas en los monos, que pueden distorsionar los resultados de la investigación, continúan solicitando y obteniendo exenciones en cuanto al alojamiento.
Los veterinarios del WaNPRC otorgan exenciones clínicas para permitir el alojamiento individual también. Esto sucede cuando los monos están enfermos con infecciones no intencionales como el SARM, tienen diarrea crónica o simplemente no se llevan bien con otros monos. En un período reciente de ocho meses, el personal veterinario reportó 217 casos clínicos de vómitos/enfermedades gastrointestinales/diarrea, 19 casos de prolapso rectal, 323 casos de traumatismos y cientos de otros casos clínicos no asociados directamente con protocolos experimentales. Si bien es cierto que las regulaciones federales sobre bienestar animal alientan firmemente el alojamiento social, la realidad es precisamente la que ves en el video: casi todos los monos están alojados individualmente.
Afirmación #3 del WaNPRC: (…) La mayoría de nuestros animales no exentos son socialmente alojados cada mes
La verdad: esta afirmación está evidentemente esbozada para engañar al público. Los “animales no exentos” solo se refiere a aquellos monos que no están siendo utilizados en experimentos, y este número es pequeño. Demasiados monos del WaNPRC están exentos de alojamiento social y la minoría restante rara vez es alojada en pareja. En lugar de invertir recursos para asegurar el emparejamiento exitoso de monos, el WaNPRC explota una laguna en las regulaciones federales y puede afirmar que los monos son “socialmente alojados” si colocan a dos monos alojados individualmente en jaulas adyacentes con barrotes suficientemente separados en un lado como para que los animales puedan atravesarlos con sus dedos. Se refieren a esto como alojamiento de “contacto de acicalamiento” o “contacto protegido”, y es un sustituto ridículo y cruel del alojamiento social en pareja o grupo. E incluso esta mínima cantidad de contacto a menudo es temporal en función de las necesidades de la investigación: las parejas de monos son divididas y asignadas a diferentes experimentadores o protocolos.
Afirmación #4 del WaNPRC: Hay razones muy importantes por las que un animal puede ser alojado individualmente por un período, las cuales incluyen: razones experimentales que requieren una exención aprobada por el Comité Institucional de Cuidado y Uso de Animales (IACUC) que incluye una justificación científica.
La verdad: lo que olvidan mencionar es que el IACUC de la universidad actúa como un comité de aprobación automática, aprobando casi todas las solicitudes de exención experimental para el alojamiento en pareja. El IACUC de la UW ha sido citado varias veces por el Departamento de Agricultura de EE. UU. (USDA) y la universidad ha sido multada por no supervisar adecuadamente el programa de uso de animales de la institución. Una vez más, está bajo investigación por el USDA y la Oficina de Bienestar de los Animales de Laboratorio. El flujo constante de multas e investigaciones puede estar relacionado con la composición del IACUC, que está dominado por experimentadores en animales empleados de la institución e incluso por miembros de la comunidad, cuyos medios de vida están vinculados al uso de animales.
Afirmación #5 del WaNPRC: el video publicado en sitios web extremistas concerniente a los animales del WaNPRC de la Universidad de Washington fue realizado entre 2012 y 2013. Entre 2012 y 2017, cuatro Centros Nacionales de Investigación de Primates (NPRCs) participaron en un proyecto de investigación conjunto focalizado en mejorar el bienestar de los primates cautivos mediante la recopilación y evaluación de datos sobre el temperamento basados en la respuesta de un animal a estímulos nuevos.
La verdad: en 2017, PETA presentó una solicitud de registros de Libertad de Información para obtener videos relacionados con un estudio supervisado por la experimentadora de la Universidad de Massachusetts–Amherst, Melinda Novak, como parte de un proyecto titulado “Comportamiento autolesivo y bienestar en primates” (Self-Injurious Behavior and Primate Well-Being). El video fue filmado en cuatro Centros Nacionales de Investigación de Primates: el Centro Nacional de Investigación de Primates de Oregón, el Centro Nacional de Investigación de Primates del Suroeste, el Centro Nacional de Investigación de Primates de Washington (WaNPRC) y el Centro Nacional de Investigación de Primates de Nueva Inglaterra, ahora cerrado. A partir de 1990, Novak recibió más de $10 millones de fondos de contribuyentes para estudiar cómo y por qué los monos se mutilan a sí mismos en los laboratorios. Ella se retiró repentinamente después de que la demanda de PETA fuera presentada.
Si bien las imágenes fueron grabadas entre 2012 y 2013, las condiciones en el WaNPRC no han mejorado. Los monos todavía están confinados en jaulas de acero estrechas y desoladas acompañados únicamente por su frustración y continúan privados de todo lo que haría que sus vidas cobraran sentido. En consecuencia, exhiben signos de angustia psicológica extrema y depresión clínica, que incluyen arrancarse el pelo, morderse a sí mismos, pérdida de pelo (alopecia) y movimientos estereotípicos, como caminar de un lado a otro y balancearse de atrás hacia adelante. El WaNPRC y los otros centros de primates no han actuado en base a la información de los estudios de Novak para mejorar las condiciones de los monos.
Afirmación #6 del WaNPRC: comprender el temperamento puede conducir a mejorar la atención individualizada y el bienestar animal. Puede indicar cómo un animal podría responder a los procedimientos de investigación, el personal, las interacciones sociales, el entrenamiento con refuerzo positivo o el enriquecimiento ambiental novedoso.
La verdad: aunque el supuesto objetivo de estos estudios de cuatro décadas fue mostrar cómo sufren los monos al estar enjaulados en laboratorios, con miras a prevenir este trauma, y aunque Novak publicó 100 artículos en revistas sobre su investigación, NINGUNA mejora para ayudar a los monos usados en experimentación se ha sumado como requisito de la Ley federal de Bienestar Animal.
Afirmación #7 del WaNPRC: Las evaluaciones del temperamento fueron grabadas en video de tal forma que las mismas personas pudieran calificarlas, reduciendo así el posible sesgo del observador.
La verdad: la Dra. Lisa Jones-Engel, primatóloga de PETA y exprofesora de la Universidad de Washington, dijo:
Estos videos revelan una asombrosa falta de rigor científico. Las condiciones experimentales varían ampliamente y exhiben una clara falta de estandarización de las variables de investigación, tales como condiciones de alojamiento/pruebas, edad, sexo y familiaridad con el evaluador. Los propios científicos lo reconocen en sus publicaciones, citando una falta de consistencia entre los sujetos y el diseño del estudio.
¡Actúa por los primates!
El WaNPRC se abrió hace seis décadas y, en todo ese tiempo, no ha producido las vacunas comercializables prometidas para proteger a los humanos contra las enfermedades. Es hora de que este centro inútil y abusivo cierre.
¡CIERREN EL CENTRO DE PRIMATES!