Cuando la policía fue alertada acerca de un incendio en el jardín del frente de una casa en el municipio Northampton, Pensilvania, seguramente nunca esperaron encontrar lo que hallaron: aparentemente un hombre le había disparado a su perro en un ojo y luego puso el cuerpo del animal sobre un asador, presuntamente usando billetes de $100 como leña.
Según MailOnline, el hombre estaba “enormemente intoxicado” y sentado en un sofá, incapaz de hablar, cuando llegaron los agentes. Su compañera de cuarto aparentemente le dijo a la policía que más temprano ella había escuchado disparos desde su habitación. Agujeros de bala en un dormitorio, “sangre” en el pasillo y una pistola encontrada en la escena parecían confirmar el reporte de la compañera de cuarto.
Según The Philadelphia Inquirer, el perro era un galgo inglés de 8 años llamado Bonanza, que el hombre adoptó en 2019. Según los informes, Bonanza había sido rescatado del Macau Canidrome Club en China, un canódromo de galgos cerrado en 2018.
Asia's only #greyhound racetrack, Macau's Canidrome, is set to close.
— PETA Asia (@PETAAsia) July 12, 2018
Please urge #Macau officials to award custody of all the dogs to local animal-protection groups so that they can be adopted into loving homes.
TAKE ACTION: https://t.co/0Po6Ms0Up0 pic.twitter.com/pOgyZzfEms
El Departamento de Policía de Northampton ha acusado al presunto asesino de Bonanza de crueldad agravada hacia los animales, descarga de un arma de fuego dentro de una edificación ocupada, posesión de instrumentos delictivos, crueldad hacia los animales y arriesgar de forma imprudente a otro. Aparentemente, a los fiscales se les concedió su solicitud de fianza de 1 millón de dólares y, según los informes, el acusado está todavía bajo custodia policial. PETA está esperando que los funcionarios protejan a todos los miembros de la comunidad castigando al hombre si es hallado culpable, asignándole el máximo tiempo de encarcelamiento permitido y prohibiéndole tener o residir con animales durante el mayor tiempo posible.
¿Y si este perro hubiera sido un cerdo?
Este acto es atroz, y los detalles probablemente te revuelvan el estómago, pero si este perro hubiera sido un pollo, ¿el dueño de Bonanza habría sido acusado de crueldad hacia los animales? Seguramente no. Y si fuera un pez el que hubieran asado, ¿el incidente habría aparecido en los titulares de noticias? Definitivamente no. Y si este perro hubiera sido un cerdo, un animal que comparte muchos rasgos de personalidad con el “mejor amigo del hombre”, ¿lo pensarías dos veces?
Entonces, si no comerías uno, ¿por qué comerte al otro? Debido al especismo. La mayoría de los humanos están condicionados para ver a ciertas especies como dignas de cuidado y compasión y a otras como menos importantes o merecedoras. Como con otras formas de prejuicio, estamos condicionados a aceptar esta mentalidad tóxica; está arraigada en nosotros. Nos lleva a ignorar nuestra propia conciencia, que nos dice que es incorrecto maltratar a todos los demás seres. Pero abordar el especismo y reconocer los derechos de otros animales es tan simple como respetar sus necesidades o dejarlos en paz. Aceptar que todos los animales son merecedores de que los dejen fuera de nuestros platos es un gran punto de partida.
Perro, cerdo o humano: ningún animal debe estar sobre una parrilla.
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