Colombia da Ejemplo: Vieja Plaza de Toros se Convertirá en Megavivero

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Después de haber sido asesinado el último toro hace siete años en la plaza El Bosque de Armenia, el ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible del Gobierno de Colombia y la alcaldía de la ciudad de Armenia están avanzando para convertir este espacio, una reliquia de una tradición violenta y anticuada, en un megavivero:

“Vamos a convertir la plaza de toros en un pulmón para el Quindío y el país, será un eje ambiental”, dijo el ministro.

Lo que fuera escenario de un espectáculo sádico y arcaico, donde los humanos infligían dolor y sufrimiento a los animales para finalmente asesinarlos de forma violenta, será convertido en un sitio donde la vida florecerá. El Bosque hará honor a su nombre convirtiéndose en un megavivero que proporcionará el material forestal para reforestar zonas aledañas del departamento del Quindío, Colombia, y garantizar la seguridad alimentaria a comunidades locales. El ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible del Gobierno de Colombia, Carlos Eduardo Correa, anunció la noticia en Twitter y agregó que la vieja plaza de toros también contará con un centro de educación ambiental.

El alcalde de Armenia, José Manuel Ríos, afirmó que el proyecto es el primer paso hacia un programa más amplio de educación ambiental y de apreciación de los recursos naturales y de los animales que viven en la naturaleza: “Será un detonante del progreso de nuestra ciudad. Armenia será reconocida como la capital verde de Colombia y ejemplo de transformación ambiental para el resto del país”, declaró.

La plaza de toros cerró en 2014 para siempre, con la creciente condena del asesinato de toros como “deporte”, incluso hasta el día de hoy. José Manuel Cortés, director de la Corporación Autónoma Regional del Quindío (CRQ), dijo a su vez que su espacio creará procesos de producción y propagación de material forestal que fortalecerá la relación del hombre con la naturaleza: “Pasaremos de un sitio que fue de muerte a un sitio que propicia la vida”, recalcó.

Por qué se acaban las corridas de toros

Cada año, miles de toros son asesinados de forma barbárica en plazas de toros en varias partes del mundo. En una corrida de toros habitual, el toro ingresa a la arena y se le acercan picadores, hombres a caballo que le arrojan lanzas en los músculos de la espalda y cuello. Este ataque afecta su capacidad de levantar la cabeza y defenderse. Los picadores clavan y retuercen las lanzas para asegurar una importante pérdida de sangre.

Luego, los banderilleros entran a pie, distraen al toro y se mueven rápidamente a su alrededor mientras le clavan banderillas (palos de colores con una lengüeta de hierro en un extremo) en la espalda. Al debilitarse por la pérdida de sangre, los banderilleros corren en círculos hasta marearlo y el toro deja de perseguirlos.

Por último, aparece el matador y, tras provocar algunas embestidas exhaustas del animal, trata de cortarle la aorta con su espada. Si el público está contento con el matador, le cortará las orejas (y a veces el rabo) y presentará como trofeos. Unos minutos después, otros toros entran en la plaza y el ciclo sádico vuelve a comenzar.

La oposición a las corridas de toros es cada vez más fuerte

La condena internacional de este espectáculo mortal sigue creciendo. El año pasado, el Concejo Municipal de Bogotá aprobó un proyecto que desincentiva las prácticas taurinas en la capital colombiana.

Las corridas de toros han sido prohibidas en al menos 100 ciudades de España. La Comunidad Autónoma de Cataluña prohibió este “espectáculo” luego de que se presentaran representantes con firmas de más de 180.000 residentes exigiendo el fin de estas masacres. Los estados mexicanos de Coahuila, Guerrero, y Sonora también las han prohibido, uniéndose a Argentina, Canadá, Cuba, Dinamarca, Italia y Reino Unido.

Pero aún necesitamos tu apoyo para ayudar a poner fin a este abuso sádico en muchas ciudades y países.

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