Los perros explotados por la industria de las peleas de perros son obligados a soportar algunos de los peores abusos imaginables. Las peleas de perros son un delito grave en los Estados Unidos y han sido prohibidas en algunos países, pero las peleas de perro clandestinas continúan ilegalmente en los EE.UU. y legalmente en otros lugares del mundo. Conoce a algunos de los perros que han sufrido, ¡y usa tu voz para ayudarlos!
1. Yo no elegí pelear
Los pitbulls son las víctimas más comunes del maltrato a perros. Para hacerlos agresivos, los peleadores de perros suelen golpearlos y provocarlos. Incluso los privan de alimento como una forma de despertar sus instintos de supervivencia.
2. Una vida encadenada no es vida
Cuando no son obligados a pelear, los perros suelen ser mantenidos en pequeños corrales o en la intemperie atados con cadenas pesadas 24 horas al día – un destino terrible para estos animales sociables que anhelan compañía y estimulación mental.
3. Los animales no son nuestros para abusar de ellos
Además de ser golpeados y privados de alimento, muchos perros son inyectados con esteroides e incluso algunos peleadores de perros les cortan las orejas para evitar que otro perro se aferre a ellas. Hasta agregan veneno para cucarachas en sus alimentos a fin de que su piel le sepa mal a otros perros.
3. No soy un objeto inanimado
Los perros que “ganan” peleas son obligados a pelear una y otra vez y son usados para criar cachorros para su venta. Muchos de los perros que no pelean o que pierden peleas son utilizados como animales de “carnada”.
4. No hay excusa para esto
Los perros que sobreviven a las peleas a menudo sufren heridas graves, tales como huesos rotos y cartílagos lesionados. Muchos sufren y mueren horas o días después de la pelea por pérdida de sangre, conmoción, deshidratación, agotamiento o infección.
5. Los obligan a pelear y los dejan morir
Cuando ya no les son útiles a los organizadores de peleas, a menudo son “desechados” de formas espantosas, como electrocución, ahorcamiento, ahogamiento o disparándoles. Otros son quemados o golpeados hasta la muerte.
Puedes ayudar – ¡Usa tu voz por los animales!
Nunca guardes silencio – Ese es el primer paso para ayudar a los animales que sufren maltrato. Hablar por los animales puede salvar sus vidas. Si sospechas que alguien está haciendo pelear perros o ves a un perro encadenado en la intemperie o encerrado en un automóvil caliente o cualquier otra forma de crueldad o negligencia, alza la voz contactando a las autoridades locales. ¡Usa tu voz para detener el maltrato animal – y comparte este mensaje con tus amigos!