Una historia que se hizo viral en la que una mujer muerde a un camello en los testículos en una parada de camiones ilustra todo lo que está mal cuando se tienen animales en atracciones de carretera.
La semana pasada, el camello Caspar estaba ocupado en sus cosas en un corral en la parada de camiones Tiger, en Grosse Tete, Louisiana, cuando Edmond y Gloria Lancaster se detuvieron en la estación de servicio con su perro. Según reportes, Edmond tiró golosinas de perro en el corral donde estaba el camello, y su perro fue a buscarlas. Mientras el hombre le hacía “gestos amenazantes” con su sombrero a Caspar, Gloria se arrastró por debajo de la valla metálica y fue a buscar a su perro. Caspar, aparentemente se sintió amenazado y se sentó sobre ella para intimidarla, y ya puedes adivinar lo que sucedió después.
"The camel did nothing wrong": Woman bites creature "in his private area" after it sits on her at truck stop zoo https://t.co/ZwUl8FRKqS
— The Washington Post (@washingtonpost) September 23, 2019
“Le mordí las bolas para sacármelo de encima, le mordí los testículos para sacármelo de encima” le dijo a la policía de la parroquia de Iberville.
“El camello no hizo nada malo”, reportaron las autoridades. “[Los Lancaster] fueron agresivos. El camello estaba en su rutina diaria”. Según se informa, las imágenes en video mostró a Edmond empujando a Caspar, incluso una vez que su esposa se había liberado.
La policía citó a la pareja por permitirle a su perro correr suelto y por invasión a la propiedad privada. Pero si en principio te preguntas por qué había un camello en una estación de servicio, no eres el único.
Durante décadas, la parada de camiones Tiger ha estado exhibiendo animales exóticos como atracciones de carretera y PETA ha estado trabajando para liberarlos desde entonces. Antes de Caspar, el tigre Tony pasó 17 tristes años confinado en una jaula en la parada de camiones, mientras PETA, nuestros amigos de Animal Legal Defense Fund, y muchos otros defensores de los animales trabajábamos para trasladarlo a un santuario. En 2017, el dueño de la estación de servicio le aplicó la eutanasia debido a su mal estado de salud.
Michael Sandlin, el dueño, insistió en que presentaría una “orden judicial de emergencia” solicitando otro tigre, pero Louisiana ha aprobado una ley que prohíbe la posesión de grandes felinos. Aparentemente, él sigue creyendo que no se puede vender gasolina y granizados sin esclavizar y maltratar animales, entonces adquirió a Caspar, a un caballo miniatura, a un coatí y a un canguro bebé. PETA está decidida a ver a todos estos animales en instalaciones respetables.
Y tú puedes ayudar. Usa la página de acción rápida de PETA para defender a muchos animales en zoológicos de carretera, en menos de un minuto.
ACTÚA POR LOS ANIMALES EN ZOOLÓGICOS DE CARRETERA
