En los eventos de rodeo, como lazo de becerro, derrumbe de cabestros, monta de caballo y toros sin silla, monta de potros salvajes, lazo de cabestros, y carreras de barriles, animales normalmente dóciles son provocados físicamente para mostrar un comportamiento “salvaje” con el fin de hacer que los vaqueros parezcan valientes.
Las picanas eléctricas, espuelas, y las correas de tronzado se utilizan para irritar y enfurecer a los animales utilizados en los rodeos. Antes de entrar en el ring, las vacas y los caballos a menudo son pinchados con una picana eléctrica, de manera tal que el dolor los encolerice.
El petral o correa de “corcoveo” es ajustada fuertemente alrededor de los abdómenes de los animales, haciendo que corcoveen con fuerza en un intento por escapar del dolor. El petral puede causar heridas abiertas y quemaduras cuando el pelo es arrancado por la fricción y la piel queda en carne viva. Ex oficiales de control animal han encontrado relieves y otros irritantes colocados bajo el pretal.
Lesiones y muertes
Los vaqueros de rodeo se arriesgan voluntariamente a sufrir lesiones al participar en los eventos, pero los animales que utilizan no tienen esa opción. Innumerables animales en los rodeos han sufrido fracturas en las costillas, la espalda y las piernas; pulmones perforados; contusiones profundas en órganos internos; hemorragias; desgarre de tendones, ligamentos y músculos; cuellos rotos, y muertes agonizantes.
Los siguientes son sólo algunos ejemplos de víctimas que se han producido en los rodeos:
- Un joven caballo gritando aterrorizado escapó de las rampas del rodeo de Can-Am, se estrelló contra una valla, y se rompió el cuello.
- Al final de una de las Estampidas de Calgary que duran nueve días en Alberta, Canadá, seis animales murieron, entre ellos un caballo que murió de un aneurisma y otro que sufrió una fractura en la pierna y se le tuvo que administrar eutanasia. Al año siguiente, otros seis animales murieron en el mismo evento. En 2005, el miedo causó una estampida mientras caballos destinados al evento estaban siendo conducidos a través de un puente. Algunos saltaron y otros fueron empujados hacia el río, lo que ocasionó nueve muertes.
- Durante el National Western Stock Show, un caballo se estrelló contra una pared y se rompió el cuello, y otro caballo se rompió la espalda después de haber sido obligado a brincar.
- Durante el Rodeo Houston, un toro con el cuello roto fue abandonado en su sufrimiento por unos 15 minutos completos antes de someterlo a eutanasia después de un concurso de derrumbe de cabestros.
El final del camino
El difunto Dr. C. G. Haber, un veterinario que pasó 30 años como inspector federal de carne, vio la venta de muchos animales de los rodeos a los mataderos que inspeccionaba. Él describió haber visto a animales “con 6-8 costillas rotas desde la columna vertebral y en ocasiones perforando los pulmones”. Haber vio animales con “tanto como 2 a 3 galones de sangre acumulada bajo la piel desprendida”. Estas lesiones ocurren cuando los animales son arrojados en los eventos de lazo de becerro o montados de un brinco por gente a caballo durante el derrumbe de cabestros.
Qué puedes hacer
- Si un rodeo va a tu ciudad, protesta ante las autoridades locales, escribe cartas a los patrocinadores, reparte panfletos en la puerta, o realiza una manifestación. Ponte en contacto con PETA para afiches y volantes.
- Otra forma de prohibir los rodeos es trabajar para instituir una prohibición estatal o local al derrumbe de becerros, evento en el que la crueldad es más fácilmente documentada. Dado que muchos circuitos de rodeo requieren lazo de becerro, eliminarlo puede dar lugar a la eliminación total de los espectáculos de rodeo.